Barcelona se juega 1.500 millones en indemnizaciones por el agua
El director del Foro de la Economía del Agua atribuye la incertidumbre sobre la gestión del agua en el área de Barcelona a los “intereses partidistas”
“Tormenta perfecta”. Así definió este martes Gonzalo Delacámara, director académico del Foro de la Economía del Agua, la actual “incertidumbre” sobre la gestión de los recursos hídricos en el área metropolitana de Barcelona. No se estaba refiriendo a la nevada, sino a los “intereses partidistas” de quienes privatizaron el servicio del agua en alta y de quienes quieren revertir ahora la gestión del agua en baja.
El Tribunal Supremo ha anulado la privatización del servicio de agua en alta que la Generalitat concedió en 2012 a un consorcio liderado por Acciona. Este martes, la compañía de la familia Entrecanales anunció que exigirá al gobierno catalán la devolución de 308,3 millones de euros además de los daños y perjuicios. La factura final podría elevarse a 500 millones de euros.
Además, si el Ayuntamiento de Barcelona tira adelante su proyecto de gestión directa del servicio del agua en baja, las indemnizaciones se calculan en otros 1.000 millones de euros. En total, están en juego 1.500 millones de euros, que pagarían los ciudadanos a través de sus impuestos.
Delacámara subraya que resulta “paradójico” que Barcelona, que durante décadas ha sido un referente internacional en las alianzas para la gestión del agua, se encuentre sometida ahora “a tanta incertidumbre por los intereses partidistas”. No mencionó nombres, pero se referiría a la privatización de Aigües Ter-Llobregat, realizada por el gobierno de Artur Mas hace cinco años, y a la intención de la alcaldesa Ada Colau de revertir la gestión del agua en baja en Barcelona. Advirtió del peligro de las transiciones precipitadas de un modelo a otro, ya sea del público a privado (en el caso de ATLL) o del mixto a gestión directa que propone Colau.
Los expertos advierten que los cambios de modelos en la gestión del agua salen muy caros
Delacámara realizó estas declaraciones en la presentación del Libro blanco de la economía del Agua, impulsado por el Foro de la Economía del Agua, que está auspiciado por la Universidad de Alcalá en colaboración con la Universidad Autónoma de Barcelona y la Universidad de Granada.
El Foro de la Economía del Agua considera “imprescindible” que se incluya a las ciudadades en el llamado Pacto nacional del agua, que el gobierno de Mariano Rajoy negocia en la actualidad. Delacámara calificó el borrador del pacto de “decepcionante” porque ha excluido a las ciudades y no ha establecido una guía para regular este sector. Reclama una regularización que ponga orden a la actual “gestión atomizada”, con 8.124 municipios con competencias sobre los servicios urbanos sobre el agua.