Así nos afectará el IVA
Los medicamentos, los alimentos básicos y los servicios educativos y sanitarios serán los únicos que no aumentarán a partir del 1 de agosto. Con la subida, España supera la carga impositiva media de Europa, Asia y América Latina
El 1 de agosto, cuando entrará en vigor el aumento del IVA general del 18% al 21% y del reducido del 8% al 10%, España subirá de golpe 14 puestos en la lista de países europeos con el IVA más caro, aunque todavía queda dos puntos por detrás de las primeras economías intervenidas: Portugal, Grecia e Irlanda, que tributan al 23%.
La carga impositiva queda en España por encima de la media europea (19,8%), y muy lejos de la media en Asia (11,6%) y la de América Latina (12,8%). También supera a Holanda (19%), Francia (19,6%) y se ubica al mismo nivel que Italia.
Los aumentos
Los productos que aumentarán son de sobra conocidos por comerciantes y empresarios, pero seguramente surgirán dudas entre los consumidores. Subirán del 18% al 21% la ropa, el calzado, las motos, los coches y las facturas de servicios básicos como el transporte, la luz y el teléfono, además del alcohol y el tabaco que además cuentan con impuestos especiales.
El ocio y la cultura (cine, teatros y museos), la factura del agua y lo servicios turísticos de bares, restaurantes y hoteles serán algunos de los productos que pasarán del 8% al 10% mientras que permanecerán inalterables los precios de los alimentos básicos como el pan, la leche, los huevos, las harinas y derivados, los medicamentos y los materiales escolares.
No subirán los servicios educativos en escuelas, institutos y universidades. Los cursos, postgrados, másters y otros ciclos formativos están exentos de IVA. Tampoco subirán los servicios prestados por clínicas privadas como tratamientos de salud y de belleza como cirugías plásticas, ya que estas instituciones han asegurado que absorberán el coste del aumento en algunos materiales.
Aplicación inoportuna
El nuevo IVA entrará en vigor cuando la medida se publique en el Boletín Oficial del Estado y, por tanto, no será aplicable a los encargos o presupuestos que se facturen antes de esa fecha. Los gestores catalanes creen que la aplicación, en plena temporada de vacaciones, supondrá un arduo trabajo para la mayoría de empresas, especialmente las pequeñas que deberán modificar el precio de todos sus productos.
“Habrá muchos empleados de vacaciones. La anterior subida se produjo en julio de 2006 y supuso problemas. Ahora, en agosto, esperamos muchos más”, asegura un representante de los gestores catalanes.
Afectación en el IPC
La subida del IVA podría tener consecuencias negativas en el Índice de Precios al Consumo, IPC. Este efecto colateral, si no se produce una brusca caída en el consumo, ocasionaría un mayor aumento de los precios de los alquileres de viviendas el próximo año, que están exentos de IVA, pero que cada año se actualizan con el IPC. La subida también pudiera tener efectos positivos en las pensiones y en los convenios colectivos (cada vez menos) que se actualizan anualmente con este índice.
Recaudación
Pese a que el aumento del IVA en teoría debe aliviar las cuentas del Estado, existe el riesgo de que se produzca una fuerte caída del consumo y el Gobierno termine recaudando menos. La subida del IVA en 2010 del 16% al 18% ocasionó una menor recaudación impositiva durante el primer semestre del año pasado, un efecto contrario al buscado, tal como advirtió hace pocas semanas el ministro Cristóbal Montoro.
Ajustes informáticos
Las empresas deberán ajustar los sistemas informáticos, un cambio sencillo en la mayoría de programas informáticos de gestión y que no requerirá ningún tipo de esfuerzo ni inversión extraordinaria. El Gobierno también deberá modificar todos sus complejos programas de gestión para adaptar sus sistemas informáticos, tal como ha hecho en anteriores ocasiones.