Arrimadas llamó a Casado para garantizarle que no apoyaría una moción de censura en Madrid
Los líderes de Ciudadanos y el Partido Popular conversaron antes de que se desencadenara el terremoto político y la convocatoria electoral en la Comunidad de Madrid
Inés Arrimadas trató de evitar que el tsunami político de Murcia acabara sacudiendo al resto del país, sin éxito. La presidenta de Ciudadanos llamó por teléfono a Pablo Casado para ofrecerle garantías personalmente de que su partido no apoyaría una moción de censura en la Comunidad de Madrid. Sin embargo, no logró convencer al líder de los populares para que evitase que se fraguase un adelanto electoral en la capital española.
Arrimadas ha narrado a los medios el contenido de esa conexión telefónica, en la que le adelantó a Casado sus planes, sin recibir ningún aviso por su parte sobre los acontecimientos que terminarían provocando también el final de la coalición en Madrid. “Yo le dije que lo de Murcia se circunscribía a Murcia que no iba a haber ninguna moción de censura más”, ha explicado.
La llamada telefónica, que también ha confirmado Casado, perseguía evitar que el derrocamiento del Gobierno de la Región de Murcia, orquestado de la mano del Partido Socialista, terminara salpicando al resto de los acuerdos entre las dos formaciones políticas. La sangría sí que se ha podido evitar en Andalucía y en Castilla y León, pero la jugada de Ayuso para convocar elecciones ha dejado en fuera de juego a Ciudadanos.
“No me trasladó para nada que ellos fueran a incumplir su palabra y convocar elecciones”
Arrimadas arremete contra el Partido Popular en plena precampaña
Arrimadas ha cargado duramente contra Ayuso, a quién responsabiliza de la ruptura de las relaciones entre los dos partidos en la capital española y de haber aprovechado el terremoto político para cumplir sus ambiciones de adelantar las elecciones. “Es una irresponsabilidad tremenda”, ha censurado.
También ha tenido un recado para el secretario general del Partido Popular, Teodoro García Egea, que ha abierto las puertas de la formación a todos los militantes y dirigentes de Ciudadanos que se sientan defraudados con el giro del partido liberal. Unas posturas enfrentadas que hacen complicado entrever una reconciliación para formar un nuevo gobierno.
Inés Arrimadas le ha pedido que “escuche más” a algunos de los barones de la formación conservadora como Alfonso Fernández Mañueco o Juan Manuel Moreno Bonilla que sí que han garantizado la gobernabilidad de la coalición tanto en Castilla y León como en Andalucía. “Todo el mundo está viendo la realidad, las cartas se ponen sobre la mesa”, ha agregado.
Arrimadas justifica su golpe al Partido Popular en Murcia
La llamada telefónica es un ejemplo del efecto en cadena que ha provocado la moción de cesura presentada en Murcia, que permitirá a Ciudadanos hacerse por primera vez con la presidencia de una comunidad autónoma, gracias al apoyo que le ha brindado el Partido Socialista.
Arrimadas ha tratado de justificar su decisión por el contexto político que atraviesa la región, con el objetivo de desvincularla del resto de acuerdos territoriales con el Partido Popular. Los casos de corrupción en el Ayuntamiento de Murcia o las polémicas vacunaciones de cargos públicos son sus dos principales argumentos para desbancar a Fernando López Miras.
“Tenemos a centenares de personas que se han vacunado con unos listados que se han ocultado”, ha insistido.