Aragonès recuerda a la CUP su compromiso en el pacto de investidura con la mesa de diálogo
El 'president' liga el cumplimiento del pacto con los anticapitalistas con la aprobación de los presupuestos de 2022
El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, y el líder del PSC, Salvador Illa (d), durante la segunda jornada del debate de política general, un día después de la intervención inicial del presidente Aragonès ante el pleno del Parlament. EFE/Enric Fontcuberta
Tras la embestida de la CUP contra la mesa de diálogo, el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, le ha recordado el pacto de investidura que posibilitó el apoyo de los diputados anticapitalistas. «Llegamos a un acuerdo, que dice lo que dice, y nosotros cumpliremos este acuerdo».
Aragonès, que ha reconocido las discrepancias con la CUP, se remite al pacto y pide tiempo. «Para llevar 100 días, el cumplimiento del pacto es correcto», ha sentenciado. El presidente de la Generalitat ha asegurado que trabajan para «generar las condiciones» que permitan el ejercicio de la autodeterminación.
El president ha vinculado el avance en el acuerdo a las cuentas de 2022. Los republicanos aspiran a aprobarlos con la misma mayoría que hizo posible la investidura, sin tener en cuenta al PSC, que se ha vuelto a ofrecer para apoyar los presupuestos. «Necesitamos los presupuestos de 2022, que contendrá las medidas para avanzar en este sentido».
«Nos mantenemos en el acuerdo que trabajamos conjuntamente»
Sobre todos aquellos escollos que quedan fuera del pacto, Aragonès se ha comprometido a sentarse a negociarlo para limar aristas que puedan impedir el apoyo anticapitalista a las cuentas de 2017. «El acuerdo dice lo que dice, aunque hay propuestas nuevas, y nos mantenemos en el acuerdo que trabajamos conjuntamente».
Ante la inquietud de Junts con Puigdemont, el presidente ha insistido en su apoyo sin fisuras a su detención en Cerdeña (Italia). Además, le ha recordado a su socio menor de coalición que la resolución del conflicto «requiere de generosidad, de mirada larga, de superar las dificultades que hay».
«La puerta abierta a la negociación está, y la unidad estratégica es fundamental. Es lo que nos hace más fuertes dentro de Cataluña, y también fuera». Aragonès ha asegurado que está «absolutamente comprometido» con el plan de Gobierno: «Vayamos acumulando fuerzas para ejercer el derecho de autodeterminación».
La CUP critica la deriva «autonomista y conservadora» de Aragonès
La CUP le había exigido a Aragonès un giro radical tanto en el eje independentista como en el económico. “Ustedes están jugando a la carta de la desescalada y de la confrontación. Están estabilizando el actual marco estatal y autonómico. Usted no está usando la Generalitat al servicio del país, sino de su agenda bilateral con el PSOE”.
Carles Riera le ha afeado a Aragonès que sus políticas se asemejen cada vez más a las de Jordi Pujol, incluso «confundiendo al partido con el país». “Están desarrollando las mismas políticas públicas de la sociovergencia, no están haciendo el giro a la izquierda que el país necesita”.
“Ponga fecha al referéndum y activemos de nuevo la hoja de ruta independentista. Nos encontraran de cara y con el puño cerrado si renuncian al conflicto y a la confrontación. Presidente, haga un giro de 180 grados y encare con firmeza y solidez para un cambio social, feminista, verde, democrático e independentista”.
