Aragonès hace caso omiso de Junts y mantiene el diálogo con Pedro Sánchez
El presidente de la Generalitat llama a la movilización del independentismo, pero a la vez asegura que "nunca" se levantará de la mesa de negociación
El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, se niega a ceder a las presiones de los sectores más radicales de Junts y mantiene el diálogo con el Gobierno de Pedro Sánchez. En declaraciones a Catalunya Ràdio, Aragonès ha dado por cerrada la polémica entre Gabriel Rufián y Carles Puigdemont, en la que el jefe de filas de los republicanos en el Congreso llamó «tarado» al expresidente catalán por impulsar la declaración unilateral de independencia (DUI) en octubre del año 2017.
En este sentido, Pere Aragonès ha pedido mirar «hacia delante» y ha evitado cualquier otro pronunciamiento contra Rufián, más allá de sus disculpas públicas. «Nos equivocamos si juzgamos una tarea política por unas declaraciones determinadas», ha expresado el presidente. De hecho, el dirigente republicano ha reconocido que ayer habló con Puigdemont para limar asperezas.
ERC «nunca» se levantará de la mesa de negociación con Moncloa
Sobre la relación con el Gobierno de Pedro Sánchez, Aragonès ha vuelto a desmarcarse de las presiones de los sectores más radicales de Junts. El presidente manifiesta que «nunca» se levantará de la mesa de negociación con Moncloa. Pese a la voluntad de mantener abiertos los canales con Madrid, Pere Aragonès ha echado en cara a Sánchez como, según su criterio, el Gobierno «se ha pensado que tiene carta blanca para actuar e incumplir aspectos básicos».
Demanda por el caso Pegasus
También en la radio pública catalana, el presidente de la Generalitat ha manifestado que, en los próximos días, presentará una demanda en los juzgados por el denominado caso Pegasus, el presunto espionaje a teléfonos de dirigentes políticos que se lleva denunciando desde el independentismo. Aragonès no descarta llevar el caso a la justicia europea o incluso denunciar al Gobierno.