Aragonès deja fuera a Junts de la mesa de diálogo
El president solo incluye a Laura Vilagrà y Roger Torrent y pide a Junts que envíe una nueva propuesta en la que solo aparezcan representantes del Govern
Aragonès ha dado un golpe sobre la mesa. El presidente de la Generalitat ha decidido que la delegación que represente a la Generalitat en la reunión con Moncloa esté compuesta solo por miembros de ERC. El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès; la consellera de Presidència, Laura Vilagrà, y el conseller de Empresa, Roger Torrent.
El presidente de la Generalitat ha dejado la puerta abierta a incluir antes de la reunión a consellers que hayan sido propuestos por el partido de Puigdemont: «En el momento en el que reciba la propuesta por parte de Junts de cuáles son los miembros del Govern propuestos por ellos, los incorporaré, lo haré. Cada voz que representa a Cataluña incrementa su valor».
Preguntado por el motivo según el cual Jordi Puigneró ha quedado fuera, Aragonès ha explicado que él espera «que lo pueda hacer en el futuro con los miembros de la delegación de Junts». Además, ha explicado que la delegación se ha aprobado en el Consell Executiu «sin la oposición de los miembros del Govern» del partido de Carles Puigdemont.
«No estoy dispuesto a perder esta oportunidad»
«No es aceptable que conozca a través de los medios de comunicación la propuesta. Hemos de poder trabajar lealmente, y por eso dejo la puerta abierta y estoy convencido de que nadie desaprovechará la posibilidad de reforzar su voz a favor de la amnistía y la autodeterminación», ha lamentado el President.
Aragonès ha insistido en que sean miembros del Govern es «lo que le da la fuerza» a la Generalitat para negociar con el Gobierno de España, que solo enviará ministros y no miembros del PSOE o Podemos. El presidente catalán ha asegurado que tiene «confianza» en todos los miembros, y que por eso «los nombré»: «El Govern tiene mucho trabajo por delante».
«No estoy dispuesto a perder esta oportunidad histórica», ha remarcado Pere Aragonès, que espera «lealtad» de su socio de gobierno en la Generalitat. Salvo que Junts acepte cambiar su delegación, la representación estará descompensada. Tan solo tres miembros del Govern, frente a siete de Moncloa.
Debilidad en el Gobierno
Aunque Pere Aragonès ha eludido ahondar en la crisis de Gobierno, el tono de irritación del presidente era evidente. La mañana ha sido tensa, el Consell Executiu ha llegado suspenderse como consecuencia de la crisis abierta por los nombramientos de Junts, aunque se ha acabado retomando.
La tensión en el Govern deja a Aragonès débil ante Moncloa. Una delegación de únicamente tres personas, con un Govern dividido y que afrontará la primera reunión tras la investidura de Aragonès. Junts lleva torpedeando la mesa desde el principio, al cuestionar el plazo de dos años antes de volver a otro «embiste democrático» y la utilidad de este organismo.