Aragonès carga contra el modelo de «crecer por crecer» tras la crítica del Cercle a su política económica

Oídos sordos de Aragonès a las advertencias de «la lenta pero inexorable decadencia» del Cercle d’Economia. El presidente de la Generalitat ha criticado el modelo económico de «crecer por crecer» y se ha escudado en el «récord de exportaciones» de la región catalana para defender su cuestionable política económica.

Así ha contestado el presidente Pere Aragonès al líder de Ciudadanos, Carlos Carrizosa, que le ha recordado el desastre que supone seguir el modelo de «decrecimiento económico» que imponen «los ricos de la CUP» y los «acomodados» de los Comuns. «Ustedes siguen ciegos y sordos con políticas que empobrecen a los catalanes».

Carrizosa ha exigido al President que coja el guante lanzado por el presidente de la Generalitat, y se reúna con todos los agentes sociales y económicos, además de recuperar la bandera de los Juegos Olímpicos de Invierno y también la ya desterrada ampliación del Aeropuerto de El Prat.

Aragonès ha tildado de «opinión» las advertencias del Cercle, y ha insistido en defender un «nuevo modelo productivo» basado en una nueva industrialización y una mayor diversificación de la economía en un contexto de «transformación verde». «El modelo de crecer por crecer es un modelo de salarios bajos».

Illa vuelve a ofrecerse para apoyar los Presupuestos

Más allá de las advertencias del Cercle, la sesión de Control al president también ha abordado la aprobación de las cuentas de la Generalitat. El jefe de la oposición, Salvador Illa, ha vuelto a ofrecerse para aprobar los presupuestos del año 2022 entre críticas por la opacidad del Govern con los plazos de presentación.

«Le pido seriedad, rigor. Tenemos que remontarnos al gobierno Montilla para encontrar un presupuesto aprobado en tiempo y forma», le ha recordado Illa. El socialista ha insistido en que la fecha límite para presentar los prespuestos al Parlament es el 10 de octubre, aunque 10 días después la cámara catalana todavía no tiene noticias.

Aragonès ha insistido en que, como anunció Jaume Giró, las cuentas se presentarán al Parlament en noviembre, y se compromete a que entren en vigor el 1 de enero. El president ha vuelto a obviar el ofrecimiento de Salvador Illa para apoyar las cuentas catalanas, al insistir que su voluntad es que se apruebe con los votos de ERC y Junts.

Enganchada con Junts por los PGE

El presidente también se ha batido con sus socios de Junts per Catalunya. Ante las llamadas a la unidad del presidente del grupo parlamentario de Junts, Albert Batet, a la unidad frente a los Presupuestos Generales del Estado, Aragonès les ha instado a volver a la vía de la negociación y sentarse con la mesa de diálogo.

Batet ha insistido en la necesidad de que la Generalitat exija la «cogestión» de los fondos Next Generation, y de la decisión sobre infraestructuras «clave», como las ferroviarias, pese a que el conseller Puigneró había desligado la defensa de Rodalies de lo que voten en el Congreso los partidos catalanes para convertir la reivindicación en una «voluntad política».

Junts también ha hecho hincapié con la defensa del catalán en la futura ley audiovisual que prepara el Gobierno de España y que todavía no ha podido tirar hacia adelante, una cuestión clave para el independentismo, que pretende blindar el catalán en plataformas como Netflix, y que quiere complementar con una reforma de la norma catalana.