ANC y Òmnium presionan a los partidos independentistas por la unidad
El aniversario del encarcelamiento de los Jordis se convierte en una reclamación a JpC y ERC para trazar una estrategia conjunta
A falta de una unidad de acción y estratégica que ni está ni se atisba, el independentismo escenificó este martes su consenso en la reivindicación de la libertad de sus presos, y muy especialmente la del expresidente de la Assemblea Nacional Catalana, Jordi Sànchez, y el presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, que fueron los primeros encarcelados por la causa del procés y cumplían un año en prisión preventiva.
«Su venganza es nuestra fuerza», clamó desde el escenario el actor David Bagés, maestro de ceremonias del acto central de la jornada conmemorativa, el que se celebraba en Barcelona, en una plaza Cataluña a la que acudieron miles de personas incluidos los principales líderes soberanistas, con el presidente de la Generalitat, Quim Torra; su vicepresidente, Pere Aragonès, y el presidente del Parlament, Roger Torrent, a la cabeza.
Los tres encajaron con caras de póker las reiteradas peticiones que se les hicieron desde el escenario y desde el público reclamándoles recuperar la unidad pérdida. Las segundas, en forma de cánticos; las primeras, provenientes del propio Sànchez, que recordó que «la unidad es muy difícil de construir y muy fácil de perder» en una carta leída por su sucesora al frente de la ANC, Elisenda Paluzie, y del vicepresidente de Òmnium, Marcel Mauri, que fue el más contundente.
Los políticos independentistas encajan los golpes
«No podemos esperar más, nos hace falta una estrategia compartida, es una irresponsabilidad muy grande que aún no hayamos sido capaces de trazarla», dijo Mauri. En primera fila entre el público, sabedores de que una cosa es pedir unidad y otra, mucho más compleja, conseguirla, Torra, Torrent, Aragonès y la consellera de Presidencia, Elsa Artadi, aplaudían y encajaban sin mover un músculo de la cara.
Al acto, en el que se conectó por videoconferencia con otras concentraciones como la organizada frente a la prisión de Lledoners -en la que permanecen recluidos los dos homenajeados- también asistieron el vicepresidente primero del Parlament, Josep Costa (JpC), el conseller Ernest Maragall (ERC), el exalcalde de Barcelona Xavier Trias (Pdecat) o el diputado de la CUP Carles Riera.
Por parte del gobierno municipal de Barcelona asistieron los tenientes de alcalde Gerardo Pisarello y Jaume Asens, no en vano el eje «antirepresivo» no solo es el único que comparte el conjunto del independentismo, sino que también suscita el alineamiento de los comunes. También acudió a la plaza Cataluña el expresidente de la Generalitat Artur Mas, pero se marchó a mitad del acto, justo antes de que empezarán los discursos de Mauri i Paluzie.