Albert Rivera se mofa de Pablo Casado (sin renunciar al pacto)
Rivera devuelve la pulla al líder PP, que le ofreció el ministerio de Exteriores: "Le ofrezco a Casado el ministerio de Universidades"
El presidente del PP, Pablo Casado, y el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera. EFE/Emilio Naranjo
La respuesta de Pablo Casado a la propuesta de Ciudadanos de formar un gobierno de coalición para “echar a Pedro Sánchez” del gobierno no ha sido bien recibida. Frente al ofrecimiento del líder de la formación azul de que sería un buen ministro de Exteriores; Albert Rivera ha asegurado que él le ofrecería a Casado “el Ministerio de Universidades”, un comentario dirigido a sacarle los colores por su polémico máster.
Desde Ciudadanos han criticado que el PP esté haciendo “bromitas” sobre el futuro de España y se dedique “repartir cargos”, justo en un momento en el que no deberían “ir de sobrados”. El líder de la formación naranja reiteró que los partidos se juegan mucho y que él “no le tiene miedo al voto”. Serán los votantes quienes decidan si el presidente será él o Casado.
Pese a los disparos intercambiados entre ambas formaciones, la oferta de Rivera a los azules de formar una coalición de gobierno después de las elecciones sigue en pie. “Le propongo al PP que más allá de ideologías, de listas… si hay un solo escaño más, que formemos gobierno”, y asegura que “nunca” pactará con el PSOE.
Ciudadanos avanza hacia la derecha pero no quiere a Vox
Eso sí, Rivera excluye a Vox de este pacto, ya que, argumenta, que no son necesarios “locos con pistolas o tiroteos en los colegios. Además, (…) puede haber familias LGTBI y no son enfermos”, ha añadido, refiriéndose a las últimas propuestas del partido de Santiago Abascal sobre una ley que permita a la población llevar armas.
Ciudadanos intenta recrear así una formación similar a la del gobierno de Andalucía, desplazándose hacia la derecha del espectro electoral y enfatizando su negativa hacia el gobierno del PSOE. Rivera ha llegado a definir la expulsión del PSOE del Ejecutivo Español como «una emergencia nacional».
