Ahora Madrid limpia a fondo la suciedad que heredó de Botella
El Ayuntamiento activa el sexto plan de limpieza intensiva en los barrios de Madrid. El nuevo gobierno exige a las contratas barridos y baldeos mixtos y la limpieza de manchas de grasa y grafitis
El gobierno de Manuela Carmena ha activado un plan de limpieza profunda de toda la ciudad para acabar con la suciedad que se extendió durante el gobierno de Ana Botella. El Ayuntamiento ha exigido a las contratas organizar jornadas de limpieza exhaustiva en un plan que se ejecuta por barrios.
Los trabajos ya se han llevado a cabo en los barrios de Usera, Lavapiés, Latina, Aeropuerto y Prosperidad y continuarán el lunes 17 y martes 18 de agosto en el barrio de Adelfas, en el distrito del Retiro, según ha informado el Ayuntamiento este jueves.
Baldeado y retirada de malas hierbas
El nuevo gobierno de Manuela Carmena está convencido de que una de las peores herencias del gobierno anterior es la suciedad extendida. Por ello, ha pedido a las empresas de limpieza subcontratadas por el gobierno anterior la retirada de todos los residuos y desperdicios fuera de los puntos de recogida y reciclaje.
El gobierno municipal también ha solicitado la limpieza de manchas de grasa y de grafitis, un trabajo que las concesionarias realizan de forma esporádica. Los trabajos incluyen barridos y baldeos mixtos y el uso de olorizante. Los equipos de limpieza también se encargarán de la retirada de las malas hierbas. El Ayuntamiento también ha comenzado a realizar campañas informativas a los comerciantes y vecinos para informar sobre la gestión correcta de los residuos.
El regreso de las inspecciones
El equipo de Manuela Carmena asegura que el gobierno anterior no ejecutaba las inspecciones de limpieza para verificar que el servicio cumple con estándares de calidad, una exigencia plasmada en los contratos. «Los trabajadores han asegurado de que el Ayuntamiento les avisaba dónde iban a ser las inspecciones para que procurasen limpiar bien esas zonas. Entonces se movían camiones y lo que se limpiaba en un lado se dejaba de hacer en otro», explican miembros del gobierno municipal.
Los vecinos y comerciantes han comenzado a notar una mejora en la limpieza. La madrugada de este jueves, un equipo de limpieza baldeaba a fondo la calle de Toledo que da acceso a la Plaza Mayor. «Es algo que no veía desde hace mucho tiempo. No recuerdo cuándo fue la última vez que los he visto por aquí», asegura Manuel Rodríguez, un vecino de la zona.
El gobierno de Manuela Carmena ha manifestado a las subcontratas de limpieza su malestar por la suciedad de las calles, plazas y jardines. El Ayuntamiento ha advertido a las concesionarias que remunicipalizará los servicios de recogida de basura y limpieza si no cumplen los estándares de calidad exigidos en el contrato. Con los trabajos de refuerzo, las empresas no podrán movilizar personal y camiones destinados a otros barrios.