Ada Colau abandona a Pablo Iglesias
Los comunes de Colau se divorcian del grupo de Podemos en el Senado y forman su propia agrupación con otras confluencias antes vinculadas a Iglesias
Se consuma la fractura entre Ada Colau y Pablo Iglesias. En Comú Podem da la espalda al grupo parlamentario de Unidas Podemos en el Senado y se suma a una espantada inaugurada por Teresa Rodríguez y Adelante Andalucía. Las dos confluencias de la formación morada crearán un grupo propio en la Cámara Alta bajo el nombre de «Grupo de Izquierda Confederal«, con representación también de Más Madrid, el partido liderado por Íñigo Errejón.
No habrá senadores de Podemos en el nuevo grupo parlamentario de izquierdas, y desde las filas del denominado «Grupo de Izquierda Confederal» se apresuran para desmentir cualquier rumor de que la separación tiene algo que ver con el conflicto político entre Iglesias y Errejón, miembro fundador del partido morado que se distanció de la formación al momento de crear su propia plataforma electoral en la Comunidad de Madrid, de la mano de Manuela Carmena.
Los comunes de Colau, Adelante Andalucía y Más Madrid se unirán en el Senado a Compromís y Més per Mallorca en el nuevo grupo, formado para aglutinar a fuerzas progresistas de implantación autonómica, explicó el portavoz de Compromís, Carles Mulet. El representante de la coalición valenciana añadió que los partidos se vieron obligados a formar este grupo porque si no estaban «abocados a compartir espacio, tiempo, y recursos en el Mixto con los grupos de derecha o extrema derecha».
«Compartimos con estas fuerzas una gran implantación en los respectivos territorios, unos objetivos para la transformación social, ecológica y territorial del Estado», dijo el que se convertirá en el portavoz de «Grupo de Izquierda Confederal», que hasta ahora se llamaba «Grupo Confederal de Unidas Podemos-En Comú Podem«. Mulet comentó que este grupo «será sin duda un punto de inflexión para visibilizar la propia pluralidad del Estado y de la izquierda».
El incendio en Podemos y las críticas a Iglesias
Se da la circunstancia de que el abandono a Podemos por parte de sus confluencias autonómicas en el Senado sucede en un momento de alta tensión en las filas moradas, ante el pulso entre Iglesias y Pedro Sánchez de cara a la investidura, que tendrá lugar la próxima semana y que ha sido objeto de tensas negociaciones entre los partidos de izquierda, que no consiguen ponerse de acuerdo.
Podemos, ya acostumbrado a las tensiones internas, atraviesa también una crisis en La Rioja, donde la diputada Raquel Romero votó en contra de la candidata socialista Concha Andreu en la investidura para la presidencia de la comunidad, lo que ocasionó la dimisión de la mitad de los miembros de la gestora del partido, aunque los problemas preceden estos hechos.
También se da la circunstancia de que la ruptura Adelante Andalucía-Podemos en el Senado se consolida una semana después de que la coordinadora de la confluencia andaluza, Teresa Rodríguez, criticó duramente la consulta de Iglesias a sus bases para decidir qué hacer en la investidura de Sánchez, algo que la dirigente tachó de «insulto a la inteligencia».
Los comunes de Colau forman un grupo sin Iglesias
El nuevo grupo parlamentario de la Cámara Alta lo integrarán, además de Mulet, Esperanza Gómez, de Adelanta Andalucía; Vicenç Vidal, de Més per Mallorca; Sara Vilà, de En Comú Podem; y Eduardo Fernández Rubiño, de Más Madrid. También cabe la posibilidad de que se una este viernes el senador por designación autonómica por En Marea, José Manuel Sande.
Hasta ahora, el grupo parlamentario de Podemos estaba integrado por Vilà, Vidal, Mulet, Gómez y Fernández Rubiño, además de María Jesús Castro del PSOE, cedida por los socialistas para que los partidos de izquierdas pudieran formar grupo propio, dado que el mínimo de senadores exigido por el Reglamento de la Cámara para formar una agrupación parlamentaria es seis.
Si En Marea finalmente entra en el grupo, no será necesario que el PSOE preste uno de sus senadores, afirmó Mulet. Caso contrario, negociarán con los socialistas. El objetivo es, en términos generales, «poder trabajar toda la izquierda alternativa junta en lugar de ir al grupo mixto por separado», según fuentes de los comunes.