El millonario ruso Roman Abramovich, dueño del Chelsea, se lleva su yate de Barcelona
Otros millonarios rusos que mantienen una relación estrecha con Putin siguen teniendo sus barcos en el puerto de Barcelona, como Serguey Chemezov y Andrei Molchanov
Roman Abramovich, oligarca ruso y dueño del Chelsea, se ha llevado su yate del puerto de Barcelona. Aunque aún no hay ninguna explicación sobre su traslado, ya que Abramovich no aparece en la lista que ha elaborado la Unión Europea de personas que quiere sancionar por tener una relación estrecha con el presidente de Rusia, Vladímir Putin.
Cuando empezó la invasión rusa a Ucrania, hace ya trece días, Abramovich tenía su yate (My Solaris) amarrado en MB92, una empresa catalana especializada en el mantenimiento y la reparación de embarcaciones. Durante todos estos días, su yate ha anclado en el puerto hasta hoy, que el oligarca ha decidido desatracarlo sobre las cinco de la tarde, según ha informado el diario catalán Ara. Su destino es desconocido.
Así, Abramovich ha seguido a Vaguit Alekperov, primer accionista de Lukoil, la segunda empresa rusa en facturación, que decidió trasladar su yate de Barcelona a Montenegro el pasado fin de semana.
Otros millonarios rusos que mantienen una relación estrecha con Putin siguen teniendo sus barcos en el puerto de Barcelona, como es el caso de Serguey Chemezov, antiguo agente del KGB y actual consejero delegado de Rostec, y Andrei Molchanov, accionista mayoritario de la inmobiliaria LSR. Por otro lado, Alisher Usmánov, magnate de la metalúrgica, tiene un amarre en Marina Port Vell, en el cuál no tiene ninguna embarcación.
Oligarcas rusos en Maldivas
Según informaba Reuters la semana pasada, al menos cinco yates de multimillonarios rusos, sancionados por su relación con Putin, ya estaban anclados o navegaban para huir de Rusia, tras la imposición de las sanciones occidentales al país. Algunos de ellos han huido a las islas paradisíacas de Maldivas, entre ellos el multimillonario Oleg Deripaska y Alexander Abramov.
Deripaska, presidente de la Compañía Unificada RUSAL -una de las empresas de aluminio más grande del mundo-, ancló su yate «Clio» la semana pasada en las aguas de Malé, capital de Maldivas, para escapar de las sanciones de Estados Unidos, entre las que figura el embargo de varias de sus propiedades como yates o mansiones. El pasado domingo, el empresario pedía por su cuenta de Twitter, que las negociaciones habían de empezar lo antes posible y que la paz es la prioridad. También está amarrado en el puerto de la capital de Maldivas el yate «Tital» del magnate industrial ruso Alexander Abramov.
Preguntados por la llegada de los yates, los funcionarios de la corporación portuaria estatal de Maldivas o del Departamento de Inmigración de Maldivas, se negaron a ofrecer más información a la agencia Efe. Sin embargo, el abogado de la nación insular, Mahfooz Saeed, explicó que el traslado podría ser por el acuerdo de extradición que tiene Maldivas con Estados Unidos, por lo que no puede entregar activos legalmente a este país si no es por delitos mayores.
Por su parte, Forbes también informó que las autoridades alemanas había incautado el yate «Dilbar» del multimillonario ruso Alisher Usmanov en un astillero de Hamburgo.
La UE ha sancionado a 680 rusos y a 56 entidades
La Unión Europea ha sancionado, hasta el momento, a 680 rusos y a 56 entidades que tienen relación directa con el Kremlin, tras la invasión a Ucrania. Los castigos de la UE impiden a los propietarios de los activos congelados vender o sacar beneficios de ellos y prohíben viajar a ningún país de la UE.
Ante la escapada de los multimillonarios rusos, Estados Unidos aseguró que tomaría medidas estrictas para confiscar las propiedades de los rusos sancionados. “La próxima semana, lanzaremos un grupo de trabajo transatlántico multilateral para identificar, perseguir y congelar los activos de las empresas y oligarcas rusos sancionados: sus yates, sus mansiones y cualquier otra ganancia mal habida que podamos encontrar y congelar bajo la ley”, publicó la Casa Blanca en su cuenta de Twitter.