El 83% de la militancia de Junts avala el pacto de Govern con ERC
La consulta, cuya pregunta ha sido redactada para forzar el 'Sí' al gobierno de coalición, ha contado con una abstención del 40%
El secretario general de Junts, Jordi Sànchez, en un acto de campaña para las elecciones del 14-F / Julio Díaz (JxCat)
Las bases han desencallado el último escollo de Junts. Los afiliados de la formación de Carles Puigdemont han apoyado en un 83% (3.364 votos) el acuerdo de Govern, que permite desencallar la legislatura con un Ejecutivo bipartito donde ocuparán siete consellerías del total de 14 que tendrá la Generalitat.
Aunque Junts ha aprobado con una amplia mayoría entrar en el Govern, un 17% de los militantes que han votado se han posicionado en contra (689 votos). El rechazo de la votación suponía que el partido de Puigdemont desencallara el gobierno sin formar parte del Ejecutivo.
El total de personas llamadas a votar era de 6.528 personas, sobre las que han participado un total de 4.053 personas, lo que supone un 62,18% del censo. Dicho de otro modo, cuatro de cada diez militantes llamados a participar en la consulta se han abstenido de ejercer su voto.
La formulación de la pregunta causa indignación
La manera en la que se ha formulado la pregunta ha generado malestar en sus bases. El redactado, muy dirigido para blindar el acuerdo de investidura, ha causado indignación en militantes de la formación, que creen que lo mejor hubiera sido una formulación más abierta para que se recogiera la opinión real de las bases.
“No gusta que te traten de tonto”, han revelado cuadros territoriales a Economía Digital. Las fuentes consultadas han explicado que, aunque “hay poca gente que quiera elecciones”, el hecho de que esta opción ni siquiera se contemplara ha sentado mal. “Son las formas”, lamentan.
Desde la formación de Carles Puigdemont creen que una pregunta menos dirigida hubiera dado el mismo resultado a Junts, pero con un abanico más amplio de posibilidades de expresar la opinión real. Lo ideal hubiera sido una pregunta abierta con tres opciones: entrar en el Govern, dar apoyo a Aragonès desde fuera o forzar una convocatoria electoral.
