Torra se zafa de la trampa empresarial de la ANC
El plan para primar a empresas afines al procés en detrimento de las del Ibex 35 coge a contrapié al Govern y JpC, que marcan distancias con la ANC
La noticia de que la Assemblea Nacional Catalana (ANC) prepara una campaña para promocionar empresas afines al independentismo como alternativa a las compañías del Íbex 35 ha pillado al Govern y a los partidos independentistas a contrapié. Y, de momento, ni el uno ni los otros están por la labor de avalarla.
La información, avanzada por La Vanguardia, cogió por sorpresa al Ejecutivo catalán, a tenor de las reacciones exhibidas tanto por el presidente de la Generalitat, Quim Torra, como por Junts per Catalunya (JpC), que, preguntados sobre el asunto, optaron por hacerse los suecos y exhibir perfil business friendly.
Torra, con los empresarios
A Torra el toro lo pilló en la Seu d’Urgell, donde este viernes inauguraba un encuentro empresarial que se celebra bajo el lema “Liderando un crecimiento sostenible”. El president aprovechaba la cita para buscar la complicidad del empresariado y solicitarle apoyo en sus demandas al gobierno de Pedro Sánchez. También por lo que respecta a la retirada del decreto con el que el gobierno de Mariano Rajoy facilitó la salida de Cataluña de las empresas que quisieran cambiar de aires.
El president emplazó a los empresarios a “pedir a las instituciones del Estado que se comprometan por el diálogo” para que “devolvamos la política a la política”, y que reclamen también al gobierno de Sánchez más inversiones y una mejor financiación para Cataluña. Se entiende que la noticia sobre los planes de la ANC de crear una lista de empresas “que han demostrado su compromiso con la república” para promocionarlas en detrimento de las demás no le caía a Torra en el momento más oportuno.
Torra dijo no saber nada de esa lista y remarcó que su Ejecutivo estará del lado de cualquier empresario, sin distinciones
El president dijo no saber nada de esa lista y remarcó que su Ejecutivo estará del lado de cualquier empresario “que tire adelante un proyecto en Cataluña”, sin distinciones. “Todas las empresas que trabajan en el país y que ayuden a que progrese son empresas catalanas a las que prestamos todo nuestro apoyo”, insistió.
Pujol y Torrent también se desmarcan
En la misma línea, el portavoz parlamentario de JpC, Eduard Pujol, también desentendió de la propuesta cuando le preguntaron por el asunto. Pujol dijo desconocer “el procedimiento, el listado y la iniciativa” de la Assemblea y abogó por “sumar, sumar y sumar” sin “hacer distinciones entre empresas”, para sacar partido, dijo, “a la voluntad transformadora” del sector empresarial y también “al talento que hay en el país”.
También el presidente del Parlament, Roger Torrent (ERC), entrevistado en La Sexta, marcó distancias con la propuesta. “Desconozco concretamente la iniciativa, pero por norma general estoy en contra de las listas”, dijo.
Viejos planes
Tras la publicación de sus planes, la ANC, que tiene que definirlos en el marco de su comisión Fem República, dijo, vía Twitter, estar «iniciando el estudio de campañas también en el ámbito económico, para potenciar una economía abierta y libre» y «no sujeta a presiones políticas, a boicots ni a comportamientos lobbistas caractarísticos de un modelo económico, el español, que queremos dejar atrás». «Las listas y los boicots», zanja la entidad en un tercer tuit, «los sufrimos la sociedad catalana y los crean los poderes políticoeconómicos del estado español».
Ya hace meses que la ANC especula con la posibilidad de una campaña de este tipo
Desde la aplicación del 155, y ante las sucesivas renuncias de los partidos independentistas, la ANC ha reforzado su perfil de ariete del procés y representante del sector más recalcitrante del soberanismo, sobre todo desde que la economista Elisenda Paluzie asumió la presidencia de la entidad. Pero lo cierto es que ya hace meses que la ANC especula con la posibilidad de una campaña de este tipo.
El pasado octubre, el vicepresidente de la entidad, Agustí Alcoberrro, ya advertía en una entrevista en El Nacional que estaban estudiando «acciones relacionadas con nuestros derechos como consumidores (…) pensando en la capacidad de incidir directamente en los intereses de las empresas del Ibex 35». Alcoberro decía entonces que la medida «no sería un boicot» sino «una acción contra estas determinadas empresas».