Tabarnia muestra su fuerza contra el independentismo
La Guardia Urbana estima en 15.000 los asistentes a la manifestación irónica "a favor de la libertad del pueblo de Tabarnia"
Miles de ciudadanos —15.000 según la Guardia Urbana— se manifestaron este domingo por primera vez en Barcelona convocadas por la Plataforma por Tabarnia, que reivindica la independencia de Barcelona y Tarragona del resto de Cataluña como ironía al proceso independentista.
La manifestación, a la que no asistió finalmente el autoproclamado «presidente de Tabarnia», el dramaturgo Albert Boadella, se inició con los asistentes congregados ante la estatua de Rafael Casanova, icono del soberanismo, a la que los organizadores hicieron una ofrenda floral.
Durante el trayecto, liderado por un autobús de la organización en el que se podía leer «Se ha acabado la broma. Viva Tabarnia«, abundaron las banderas españolas, así como también enseñas de Tabarnia y otras pocas catalanas. Algunas de las proclamas de los asistentes fueron «¡Yo soy tabarnés!», «¡Yo soy español!», «¡Boadella, president!» o la versión del «¡Que viva España!» de Manolo Escobar.
También se corearon consignas como «Puigdemont, a prisión», «No son presos, son golpistas» o «Un, dos, tres: que cierren TV3». Irónicamente, usando mensajes comunes en las manifestaciones soberanistas, al comienzo de la movilización también gritaron «libertad», «fuera las fuerzas de ocupación» o «las calles serán siempre nuestras».
Jaume Vives dio paso al himno de España para «purificar un poco el ambiente» de plaza de Sant Jaume
El portavoz de la Plataforma por Tabarnia, Jaume Vives, aseguró al inicio del recorrido que «Rafael (Casanova) nos pertenece», y defendió que el hecho que el soberanismo se referencie en su figura es «la gran demostración de como han falseado la historia».
Al llegar la manifestación a la plaza de Sant Jaume, Vives dio paso al himno de España para «purificar un poco el ambiente que se respira en esta plaza», y concluyó el acto instando a los asistentes a «hacerle una butifarra (peineta) al ‘procés’ que nos quieren imponer». Aseguró, en modo irónico, que la movilización congregó «a dos millones de personas, y dijo del «presidente de Tabarnia», Boadella: «Él nos llevará hacia Ítaca».
Esta movilización llamaba a «todos los Tabarneses, catalanes, españoles y europeos» a «exaltar la fraternidad y el optimismo frente a la búsqueda de la ruptura y la falsa diferenciación», según rezaba su convocatoria. La manifestación «a favor de la libertad del pueblo de Tabarnia» la lideró la denominada Embajada Móvil, encabezada por el presidente de la Plataforma por Tabarnia, Miguel Martinez, y por el mismo Vives.