Sánchez ignora a Ciudadanos: reunirá la mesa soberanista en julio
El Gobierno mantiene en pie la mesa del "conflicto catalán" después de que Cs pidiera su fin para dar paso a una alianza estable
El Gobierno cree que sería «oportuno» que la mesa de diálogo con la Generalitat vuelva a reunirse después de las elecciones vascas y gallegas del 12 de julio. Así lo ha previsto la ministra portavoz María Jesús Montero este martes en la rueda de prensa posterior al consejo de ministros, en la que ha ratificado la voluntad de Pedro Sánchez de retomar las negociaciones con el Govern de Quim Torra durante el mes de julio.
Ante las presiones de Ciudadanos para que el Ejecutivo rompa relaciones con sus socios de Esquerra Republicana, impulsores de la mesa de diálogo soberanista, la también titular de Hacienda ha insistido en que «la única solución» para el llamado «conflicto catalán» es el diálogo y la discusión con el soberanismo. «La pandemia ha significado una suerte de paréntesis», pero en la llamada normalidad «hay que retomar esa agenda pactada», ha añadido.
Cs ha ofrecido a Sánchez un acuerdo de Presupuestos Generales del Estado a cambio de que disuelva la mesa de diálogo, lo que supondría a su vez divorciarse de ERC. Pero el Gobierno se ha limitado a «agradecer la predisposición» de Inés Arrimadas «para llegar a acuerdos», desestimando sus sugerencias y señalando que los encuentros con Quim Torra y las negociaciones de las cuentas «son elementos distintos», pese a que ERC no los desvincula.
«El conflicto lleva ya enquistado mucho tiempo», ha insistido Montero, que a su vez ha señalado que este «no es el momento en nuestro país ni de vetos cruzados ni de que estemos señalando aquellas cuestiones que nos separan; es el momento de altura de miras». Con respecto a los Presupuestos, la portavoz ha afirmado que los negociará con todas las formaciones políticas y que espera que el PP «participe» en esas conversaciones para llegar a un entendimiento.
La hoja de ruta de Sánchez, intacta
La pandemia del coronavirus y sus desastrosos efectos económicos y sociales no han transformado la hoja de ruta del Gobierno de Sánchez, ha confirmado Montero, para quien la emergencia sanitaria tan solo ha sido un «paréntesis» en la agenda política de la coalición. «Esta vuelta a la nueva normalidad nos permite ir retomando algunos asuntos», ha apostillado, en alusión a la segunda reunión de la mesa de diálogo.
«El presidente ya anunció que no tendría ningún inconveniente en reunirse en julio y parece oportuno que sea después de los encuentros electorales en el País Vasco y Galicia, donde se concentra también parte de las energías» de las formaciones políticas. «No va a haber ningún inconveniente con que a lo largo de julio, si se ponen de acuerdo las agendas de ambos gobiernos», el Ejecutivo y el Govern puedan volver a reunirse.
«El Govern tendrá que decir y decidir si le parece oportuno celebrar la convocatoria de la mesa en julio si la situación epidemiológica continúa en la senda que estamos actualmente», ha concluido la portavoz.