Sánchez e Iglesias pactan 20 ministros a la espera de Junqueras
El ámbito económico dependerá exclusivamente del PSOE, que no cede a las propuestas de Unidas Podemos como la creación de una empresa pública energética
El Consejo de Ministros y las medidas que se van a poner en marcha cuando empiece de nuevo la actividad en la Moncloa ya están cerradas tras aceptar tanto por parte del PSOE como por parte de Unidas Podemos un programa conjunto para el futuro ejecutivo en coalición. Sin embargo, no se dará a conocer hasta que la investidura sea un hecho, tal como acentuaron ambas fuentes al poco tiempo de terminar las elecciones.
De esta manera, el equipo de Pedro Sánchez dominará las decisiones económicas en España, apaciguando así las criticas de las élites económicas y de los que se oponen al acuerdo con Unidas Podemos y a las negociaciones con los independentistas, según han apuntado varias fuentes al periódico La Razón. Así su partido esquiva las medidas que tenían previstas desde el partido morado.
También han avisado desde el PSOE que, a menos que todos los acuerdos para que Sánchez sea investido estén amarrados con anterioridad, el presidente en funciones no acudirá a una investidura evocada al fracaso. Necesitará, por lo tanto, recabar más apoyos que negaciones, y el soporte de ERC mediante la abstención. «No iremos a una investidura fallida», aseguró este viernes la portavoz del ejecutivo, Isabel Celaá.
«Las negociaciones entre los partidos avanzan. Es esperanzador porque se están manteniendo los puentes de diálogo. Si hay nuevas citas, hay nuevas oportunidades y es ocasión de demostrar la apuesta por la convivencia y el respeto a la pluralidad», ha señalado sobre el compromiso de PSOE, PSC y ERC de verse de nuevo el 3 de diciembre, tras la primera reunión del jueves en el Congreso.
Los veinte ministros de acuerdo al pacto entre Sánchez e Iglesias
Pese a la absoluta discreción que ha imperado por parte de ambos partidos para proteger los futuros cargos en la Moncloa hasta la fecha prevista de investidura las próximas navidades, se sabe por dónde van a ir los tiros.
Pedro Sánchez, enmarcado bajo el poder de la vicepresidenta económica, Nadia Calviño, se queda con el área económica imponiéndose a la voluntad de Pablo Iglesias de tomar medidas que pasan por un impuesto a la banca, la creación de una empresa pública energética, bajar el precio de la luz o intervenir el mercado del alquiler.
Ya lo asumia el líder de Unidas Podemos durante las negociaciones en una carta a la militancia que a su partido le iba a tocar “ceder mucho” para lograr la coalición que resultó tan difícil tras las pasadas elecciones del 28-A. En el camino de la negociación, renunciaron también a presidir el ministerio de Vivienda al asumir que “no vamos a poder parar desahucios, ni regular el alquiler”, según aseguraba un diputado del partido.
Por su lado, el PSOE habría aceptado una subida progresiva del salario mínimo interprofesional de los españoles, pero no la completa derogación de la reforma laboral, que aparecía en términos generales en el acuerdo para los Presupuestos Generales pactados el año pasado. Así, el Ministerio de Trabajo, que recae en la figura de Yolanda Díaz, estará desgajado de la Seguridad Social.
Unidas Podemos lidera las materias de Universidades e Igualdad
Serán tres o cuatro ministerios los que encabece Unidas Podemos, –unidos a la vicepresidencia social de Pablo Iglesias– que ya están cerrados, aunque todavía no son públicos.
El partido morado ostentará la cartera de Igualdad, encabezada por Irene Montero, así como la materia de Universidades. Este último puesto ha sido cedido a los comunes con el fin de que en el nuevo Consejo de Ministros estén representadas todas las sensibilidades del partido. El propio Pablo Echenique se habría apartado del puesto para que un catalán quede al cargo. Ya se ha descartado el perfil de Jaume Asens para tal cargo.
En esta nueva coalición ya cerrada se han mantenido los 17 ministerios actuales de Sánchez, de manera que con los nuevos cargos el gabinete podría componerse de 20-21 ministros en el caso de crearse un cuarto ministerio. En cuanto a la materia de Ciencia que se desgaja de Universidades, no peligra el nombre de Pedro Duque, supuestamente porque Sánchez no estaría dispuesto a dejarle caer debido al perfil científico bastante valorado dentro del Gobierno.
Continuarian también en sus puestos José Luís Ábalos, actual ministro de Fomento y de María Jesús Montero, responsable de Hacienda. La cartera de Transición Ecológica seguirá también bajo la mano de Teresa Ribera y no se esperan grandes cambios para el titular de Agricultura, Luis Planas.
Los únicos nombres que están en duda, pero que podrían ocupar otras responsabilidades, son el de la ministra de Trabajo, Magdalena Valero y María Luisa Carcedo, Sanidad.