Sánchez aprueba otra prórroga por la mínima y tras dinamitar alianzas

Pedro Sánchez ha conseguido aprobar por la mínima una nueva prórroga del estado de alarma para otros 15 días –y no para un mes como el Ejecutivo pretendía– gracias al apoyo polémico de Ciudadanos que le ha costado su alianza con ERC, que finalmente ha votado en contra tras haber jugado el Gobierno a dos bandas. 

El Gobierno ha conseguido así la prórroga por la mínima gracias al apoyo del PNV y de otros partidos minoritarios como Más País, Coalición Canaria, PRC y Teruel Existe. Por otro lado, PP, Vox, ERC, JxCat, CUP, Foro Asturias y Compromís han decidido votar en contra de extender el estado de alarma, mientras que Bildu, el BNG, Navarra Suma y Nueva Canarias han decidido abstenerse en la ampliación de la medida. 

El Ejecutivo ha conseguido aprobar su medida a costa de quemar navíos y con el apoyo más exiguo desde que empezó la pandemia por coronavirus tras negociar a dos bandas con Ciudadanos y ERC al mismo tiempo. Los republicanos han afeado a Pedro Sánchez su pacto con los naranjas. «Hoy estamos llevándonos por delante de forma irremediable el espíritu de la investidura«, ha lamentado Gabriel Rufián en la sesión de esta mañana sin disimular su disgusto. 

Rufián ha recordado esta mañana que una de sus peticiones para apoyar la prórroga era que «hubiera corresponsabilidad» y acabar así con el «mando único» y la recentralización de competencias por el coronavirus. También, querían un estado de alarma moditicado para reforzar la coordinación administrativa y dar protagonismo a los ejecutivos autonómicos. 

El portavoz de Ciudadanos, Edmundo Bal, ha rebajado las expectativas de convertirse en la bisagra del Gobierno y han intentado justificar su posición al calificarse como partido de estado: «Sus socios son los que le dejan en la estacada». El partido naranja asume esta votación pese a una nueva pérdida, con la dimisión de Marcos de Quinto​ que este miércoles vive su último pleno como diputado tras su discrepancia con el apoyo a Sánchez. 

«Un pollo sin cabeza»

Más duro ha sido con Pedro Sánchez el portavoz del PP, Pablo Casado, que ha ironizado con que el presidente «va como un pollo sin cabeza cambiando de socios»: «Su plan ha sido un fracaso. Todo lo que dependía de usted ha salido mal». El líder popular ha lamentado que en «su universo paralelo usted todo lo hace bien» y «la culpa» sea de los que se le oponen: Su problema no son las caceroladas ni las protestas en Núñez de Balboa, sino las colas kilométricas para pedir comida en Aluche».

Por su parte, Pedro Sánchez ha pedido perdón a la ciudadanía por los errores que ha cometido su gobierno, aunque con poca autocrítica de fondo: «Quiero pedir disculpas a los ciudadanos por los errores propios dictados por la urgencia, la penuria en los recursos y la ausencia de precedentes en esta crisis». 

«Más allá de las diferencias puntuales de criterio, más allá de las declaraciones apresuradas o del ruido de fondo que en muchas ocasiones escuchamos hemos tenido que trabajar codo con codo a todos y a todas nos ha unido el mismo deseo: salvar vidas, servir a nuestro país en medio de la situación más adversa que podíamos imaginar», ha defendido el presidente del Gobierno.