Rajoy le cierra todas las puertas a Mas: no habrá referéndum
El jefe del Ejecutivo asegura que ha actuado “con proporcionalidad” ante el 9N evitando la imagen de la retirada de urnas
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, no se mueve. No quiere. Asegura que tampoco puede. El hecho es que el jefe del Ejecutivo le ha cerrado a Artur Mas todas las puertas en su deseo de convocar un referéndum de autodeterminación.
No lo podrá acordar con el Gobierno. “Si Mas desea ese referéndum de autodeterminación tiene una vía, que es plantear una reforma de la Constitución”, ha asegurado Rajoy.
Tras una inicial intervención, Rajoy ha constestado las diferentes preguntas planteadas. Pero la idea central del mandatario español sigue invariable. Está a favor de la reforma de la Constitución, pero “siempre que se diga qué se quiere cambiar y cómo”, ha afirmado.
Rajoy entiende que Mas debería seguir gobernando, que en Cataluña “se han celebrado elecciones en dos ocasiones desde 2010”, y que no puede pedir diálogo, “cuando, en realidad, lo que pide es que se le haga caso sobre un referéndum”. «No se puede dialogar con imposiciones», ha sentenciado.
División de la soberanía española
El jefe del Ejecutivo se ha mostrado abierto para hablar con Mas cuando quiera. Pero no desea que se le imponga la división de la soberanía española, «y creo que a los españoles tampoco les gustaría, y tendrían razón».
Pero Rajoy ha insistido en que, pese a considerar “ilegal” la consulta, de la que ha destacado en varias ocasiones que “dos tercios de los catalanes decidieron no participar”, el Gobierno decidió actuar “con proporcionalidad”. Es decir, que tras la suspensión de la consulta por parte del Tribunal Constitucional, se trató de evitar la imagen de “retirada de las urnas”, una imagen que “los organizadores del 9N tal vez hubieran preferido”.
La decisión sólo en manos de la Fiscalía
La posibilidad de que la Fiscalía presente una querella contra Artur Mas atañe “únicamente a la Fiscalía”, ha afirmado Rajoy, con la idea de que respeta la decisión que tome. De esa posición tampoco se ha movido, pese a las reiteradas preguntas.
La firme negativa de Rajoy deja a Mas con poco margen de maniobra, si obedece a sus propias palabras. El President aseguró que le enviaría una carta al jefe del Ejecutivo instándole a pactar un referéndum,
Pero la respuesta apenas ha llegado 24 horas después de ese anuncio. Ahora Mas deberá decidir si convoca, y cómo lo hace, elecciones anticipadas. El vértigo a lo desconocido podría convencer al President a seguir al frente de la Generalitat, a pesar de las presiones de Esquerra Republicana, y de los colectivos independentistas más movilizados.