Rajoy avisa: “La decisión de Mas dificulta el futuro”

Las cosas no serán más fáciles a partir de mañana. El Gobierno español considera un desafío en toda regla la actitud del President Artur Mas, que se ha autoproclamado como el “responsable” de la pseudoconsulta, incitando al Ejecutivo a ir contra él, si quieren.

El Gobierno ha considerado, aunque no de forma pública, porque intenta restarle importancia, que el proceso de participación en Cataluña “es un ejercicio antidemocrático e inútil”, sin efecto jurídico. Y, según fuentes del Ejecutivo, la actitud de Mas dificultará el diálogo a partir de ahora.

El Estado, sin capacidad

Sin embargo, el Gobierno tampoco ha presionado para que la consulta no se produjera. La Fiscalía del Estado instó a la Fiscalía de Cataluña a abrir alegaciones por el uso de los centros de secundaria para votar, pero no ha tomado ninguna decisión concreta.

Hasta última hora el Ejecutivo pensaba que Mas cumpliría una especie de pacto implícito para que la consulta fuera ejecutada sólo por voluntarios. Pero él mismo ha reivindicado que está detrás, y la consellera de Governació ofrecerá en las próximas horas todos los datos de participación.

Es decir, la pseudoconsulta la organiza el Govern de la Generalitat. Y el Estado se ha quedado sin capacidad de maniobra.