Quim Torra ordena una purga en los mossos
El president exige al conseller de Interior que tome medidas contra los agentes antidisturbios por las cargas en las manifestaciones "antifascistas"
El presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha ordenado al conseller de Interior, Miquel Buch, que actúe contra todos aquellos agentes de los mossos d’esquadra que, a su juicio, se excedieron en las cargas policiales contra colectivos autodenomidos «antifascistas» en las manifestaciones de ayer, jueves, en las ciudades de Girona y Terrassa.
Torra no sólo ha dado esta orden a Buch, sino que ha puesto un plazo límite de cuatro días al titular de Interior para acometer cambios. De lo contrario, el presidente de la Generalitat se encargará personalmente de tomar medidas.
Tras el ultimátum recibido, Buch se apresuró a dar explicaciones ante los medios para alinearse con aquellos que criticaron a los mossos. La CUP exigió, una vez más, la dimisión de Buch, mientras que ERC reclamó investigar unas cargas que, entre otras consecuencias, produjeron una herida en la mano de la diputada de la CUP Maria Sirvent debido al disparo de un proyectil de viscoelástica. Sirvent participaba en una concentración en Terrassa.
Un joven fue detenido y 20 personas resultaron heridas, entre ellas 15 agentes, en una manifestación en Girona
La conclusión del conseller, tras visionar las imágenes de las cargas en Terrassa y en Girona, es que hubo actuaciones de los mossos que «no se ajustan a los principios de una policía democrática». «Se tomarán decisiones si hubo mala praxis», prometió.
La purga en la policía autonómica afectará, con toda seguridad, a la división de antidisturbios de los mossos d’esquadra. «No me temblará el pulso para echar a agentes de la Brimo (el cuerpo de antidisturbios)», afirmó Buch en Catalunya Ràdio.
Los incidentes en Girona
Durante el aparatoso enfrentamiento entre los mossos y colectivos independentistas de ayer, jueves, en Girona, la policía catalana cargó contra el grupo que trataba de impedir la celebración de un acto a favor de la Constitución en el centro de la ciudad. El resultado fue un detenido y una veintena de heridos, entre ellos 15 agentes.
Varios centenares de personas, muchas de ellas encapuchadas, irrumpieron en la plaza 1 de octubre de Girona, hasta hace poco llamada plaza de la Constitución, para boicotear el acto conmemorativo del aniversario de la Carta Magna convocado por el colectivo «Borbonia», que se define como «un movimiento ciudadano que aúna a los vecinos de Girona contrarios al movimiento independentista», y que recibió el apoyo de PP y Vox.
La plaza estaba vallada para evitar la irrupción en la misma de las manifestantes contrarios al acto conmemorativo y alrededor de una veintena de furgonetas de los Mossos d’Esquadra se encontraban en ese lugar y sus aledaños para evitar enfrentamientos.
Al llegar a la plaza, los manifestantes derribaron las vallas situadas en uno de los extremos para intentar acceder a la misma por la fuerza, momento en el que se produjo la primera carga de los Mossos d’Esquadra.
Las fuerzas antidisturbios de los Mossos establecieron un cordón con agentes y furgonetas para separar a los dos grupos antes del comienzo del acto conmemorativo del 40 aniversario de la Constitución
Los incidentes en Terrassa
En Terrassa, los mossos cargaron contra un grupo de manifestantes que intentaba superar el cordón policial para impedir un acto de Vox de conmemoración de la Constitución en la plaza Primero de Mayo.
Durante las protestas, se produjeron quemas de contenedores y destrozos en el mobiliario urbano. La policía catalana detuvo a dos personas, acusadas de delitos de atentado a la autoridad.
De acuerdo con el balance efectuado por el Sistema de Emergencias Médicas (SEM), en las cargas en Terrassa resultaron heridos cinco mossos d’esquadra, tres de los cuales fueron por su propio pie a la mutua para ser asistidos.