Puigdemont reaparece para descartar el adelanto electoral que pide ERC
El expresident se reúne en Bélgica con Torra y aboga por recuperar la "iniciativa política" del independentismo, pero sigue sin concretar cómo
Carles Puigdemont ha reaparecido este miércoles en Bruselas tras las vacaciones y ha aprovechado su primera rueda de prensa desde julio para ponerle los puntos sobre las íes a Esquerra en el pulso que los de Oriol Junqueras mantienen con sus socios de Junts per Catalunya (JxCat) a vueltas con un posible adelanto electoral.
Puigdemont ha encabezado junto a Quim Torra, la reunión que desde el martes ha mantenido JxCat en la capital belga, y, acabado el encuentro ha comparecido de la mano de su sucesor al frente de la Generalitat. Pero ni uno ni otro han adelantado nada sobre la respuesta a la inminente sentencia de la causa del procés que el independentismo lleva meses tratando de consensuar, hasta ahora sin éxito.
Lo que sí ha hecho el expresident es desplegar el argumentario apuntalado por la formación en su cita belga: la sentencia supondrá el final de «un ciclo de dos años de represión», y, llegados a ese punto, el independentismo ya no puede conformarse con seguir defendiéndose. Además, argumentó Pugidemont, le toca «retomar la iniciativa política» de la mano de la de la sociedad civil, como se hizo a la hora de organizar el 1-O. Y recuperación, se concrete en lo que se concrete, reclama «estabilidad y fortaleza». Lo que, según la lectura de los posconvergentes, no es compatible con las «prisas electorales».
En que consistirá esa nueva iniciativa sigue siendo un misterio que nadie desvela, porque aún no hay acuerdo al respecto. Lo que sí hubo, según Puigdemont, en la cumbre de partidos y entidades independentistas celebrada el fin de semana en Ginebra son «avances», aunque tampoco desveló la naturaleza de los mismos. En ese punto, y solo en ese, sí hay consenso con ERC, que el lunes ya se aferró a la existencia de esos supuestos pasos adelante en la negociación.
Puigdemont recuerda a ERC su amago de investidura
Por lo demás, Puigdemont minimizó las discrepancias entre unos y otros, alegando que lo importante es que comparten «un objetivo común». Pese a lo cual, el expresidente catalán volvió a dedicar una pulla a Esquerra por haber frenado sus amagos de investidura.
Así, cuando le preguntaron si estaría dispuesto a volver a amagar con ella, apuntó que su prioridad ahora es conseguir que se le reconozcan sus derechos como eurodiputado, pero no se ahorró la apostilla: «Yo, desde el 22 de diciembre de 2017, y muy especialmente desde el 30 de enero de 2018, estoy a disposición del Parlament». Las fechas corresponden al día después de las últimas catalanas y el día en que estaba fijado el pleno para investirlo que el presisdente del Parlament, Roger Torrent, acabó suspendiendo tras el veto del Tribunal Constitucional.
Ahora, lo que está por ver es si, descartado por activa y por pasiva el avance electoral planteamiento por ERC, es si JxCat comprará la otra alternativa lanzada por los republicanos: el de intentar formar un gobierno de concentración ofreciendo la entrada en el mismo a la CUP y los comunes, aunque estos últimos ya se han borrado. Ni Puigdemont ni Torra se manifestaron al respecto.