Puigdemont pide un plan B a la mesa de diálogo tras una sola reunión
El expresidente de la Generalitat pone en cuestión la utilidad de las negociaciones entre Gobierno y Generalitat
Carles Puigdemont ha hecho un llamamiento al soberanismo catalán para buscar una alternativa a las negociaciones entre Gobierno y Generalitat, puesto que es «escéptico» respecto a los resultados que pueden ofrecer. Aunque la mesa de diálogo tan solo se ha reunido una vez, el líder huido ya pide un plan B y, al mismo tiempo, es partidario de no renunciar a la vía unilateral para la independencia de Cataluña.
Puigdemont ya reclamó el pasado sábado, durante el acto del Consell per la República celebrado en Perpiñán (Francia), que el independentismo catalán se prepare para «la lucha definitiva» y, en este sentido, emplazó a las bases soberanistas a una «movilización permanente».
Este lunes, en los micrófonos de Catalunya Rádio, Puigdemont cuestionó la utilidad de la mesa de negociación entre Gobierno y Generalitat cuando apenas han pasado cuatro días de la reunión que encabezaron Pedro Sánchez y Quim Torra.
«Como estamos convencidos de que, por desgracia, la manera de llegar a la independencia deberá ser superando una pared que el Estado tiene preparada para nosotros, tenemos que llegar a la pared más preparados que en otoño de 2017», dijo Puigdemont.
Sobre la mesa, subrayó que «de momento no es útil porque no se ha llegado a ningún acuerdo». A su juicio, cree que este proceso puede afrontarse con una combinación de «esperanza y escepticismo», y aconsejó «ser prudentes» para no caer en «falsas expectativas».
«El sit and talk (sentarse y hablar) —el lema que el independentismo ha empleado para reclamar negociaciones con el Gobierno— no puede ser un wait and see (esperar y mirar). Tiene que ser las dos cosas», dijo, al tiempo que aseguró que «la inmesa mayoría de catalanes quieren una negociación de verdad».
Volviendo sobre los pasos de la vía unilatera, Puigdemont situó como uno de los «referentes» del soberanismo catalán el proceso de independencia de Montenegro, culminado en 2006 al separarse de Serbia por las bravas. En este sentido, destacó que él «nunca» ha abandonado la vía unilateral.
Puigdemont y las contradicciones del independentismo
Preguntado por las declaraciones Clara Ponsatí, realizadas el pásado sábado, en las que la eurodiputada de JxCat acusó al Govern de Torra de dejarse «embaucar» ante una «engañifa» (así calificó la mesa de diálogo), Puigdemont se limitó a decir que «en el independentismo hay muchas voces». «Algunas críticas con las otras y que defienden cosas que pueden parecer contradictorias», comentó.
Sin embargo considera que son «necesarias». El expresidente catalán, finalmente, pidió encontrar «un camino conciliador» para que todas las fuerzas soberanistas puedan «remar juntos». «Nos necesitamos a todos, no sobra nadie y todas las estrategias son válidas». «No estamos tan lejos», concluyó.