Pedro Sánchez planea exhumar a Franco del Valle de los Caídos
El gobierno socialista perfila una reforma integral de la ley de memoria histórica que permita sacar a Franco del Valle de los Caídos
Pedro Sánchez tiene toda la intención de retomar uno de los proyectos comprometidos por el PSOE: la exhumación de Francisco Franco para su salida del Valle de los Caídos.
Antes de llegar a La Moncloa, el presidente presentó en diciembre una propuesta de reforma integral de la ley de memoria histórica, bajo la premisa de que «ignorando un pasado incómodo no se puede construir un futuro confortable».
No es de extrañar que ahora que lidera el Ejecutivo Sánchez incluya la propuesta entre sus primeras medidas, después de que en marzo pasado el gobierno de Mariano Rajoy tumbara la reforma propuesta por el PSOE.
La ONU recomendó retirar del Valle de los Caídos los símbolos y vestigios del franquismo
La propuesta de reforma pasa por asumir las recomendaciones de la ONU sobre el Valle de los Caídos (entre otros, la retirada de símbolos y vestigios del franquismo) y atender las peticiones de las asociaciones de víctimas del franquismo.
«Cuando pasaron los años, se dijo que no merecía la pena, que la historia estaba olvidada. Pero un país que honra a sus víctimas está en paz con el pasado», manifestó Sánchez en diciembre.
Este lunes, el secretario del área de justicia y nuevos derechos de la comisión federal del PSOE, Juan Andrés Perelló, presentará a la presidencia del partido la reforma pero con algunas novedades.
«Eso incluye el traslado de los restos de Franco del Valle de los Caídos, que es, además, un compromiso adquirido en el último congreso socialista», explicó Perelló a El País.
«Tenemos una deuda histórica con los muertos y con sus familias»
«Las exhumaciones tendrán que ser políticas públicas, se planteará la nulidad de todos los juicios del franquismo, se dará solución a la situación del Valle de los Caídos y se prohibirá la apología del franquismo y del fascismo», agregó el sábado en un acto en Teverga.
Perelló considera que el país debe equipararse «a las democracias europeas más consolidadas, porque una nación demuestra su decencia cuando trata bien a sus muertos, y tenemos una deuda histórica con los muertos y con sus familias».
El Ejecutivo estudia la fórmula para realizar el traspaso y maneja como opción presentar un real decreto para facilitar su rápida aplicación.