Pedro Sánchez da largas a su reunión con Pablo Iglesias
El líder socialista da por perdido el mes de agosto con Pablo Iglesias y retomará dentro de unas semanas los contactos con Podemos y los independentistas
Pedro Sánchez no se verá con Pablo Iglesias en las próximas semanas. El presidente del Gobierno en funciones dio por finalizada la primera etapa de su nueva ronda de contactos este viernes y anunció que la retomará hasta finales de agosto y principios de septiembre. También informó de que no se reunirá únicamente con dirigentes de Unidas Podemos para intentar lograr un acuerdo de investidura.
En declaraciones a los medios de comunicación antes de su último encuentro de la semana, con diversas organizaciones del sector cultural, en el marco de una ronda de contactos con los colectivos sociales del país, Sánchez avanzó que «hablaremos con el PNV, el Partido Regionalista de Cantabria, las fuerzas nacionalistas de Cataluña y lógicamente con Unidas Podemos«.
Se trata, a juicio del líder socialista, de formaciones «susceptibles de apoyar la investidura» que previsiblemente se celebrará en septiembre, después del fracaso de finales de julio. Ciudadanos no formará parte de esta ronda de contactos dada la negativa de Albert Rivera de reunirse con Sánchez. Por lo tanto, «oído cocina», comentó el presidente en funciones.
«No es la primera vez que el señor Rivera se niega a hablar conmigo. Es su forma de entender la democracia. Los ciudadanos tomarán nota del comportamiento de los distintos líderes de las fuerzas políticas», sentenció el secretario general del PSOE este viernes.
Durante las próximas semanas Sánchez se dará a la tarea de «compendiar y sintetizar las propuestas» que le han planteado las entidades sociales esta semana. Su plan pasa por presentar a finales de mes una «propuesta abierta» de «un programa susceptible de negociar en base a las propuestas, no del continente sino del contenido», según declaraciones recogidas por El Independiente.
Sánchez se reunirá con Iglesias… y con ERC y JxCat
La ronda de contactos también supondrá encuentros con las fuerzas nacionalistas catalanas Esquerra Republicana (ERC) y Junts per Catalunya (JxCat), a la luz de que ni Ciudadanos ni el Partido Popular están por la labor de facilitar su investidura a través de una abstención. Sánchez pedía este gesto a las formaciones de derecha para no depender de los partidos independentistas. Ahora parece abocado a ello.
Después de que la portavoz parlamentaria del PSOE, Adriana Lastra, asegurara que Sánchez no tenía nada que negociar con los de Carles Puigdemont y Oriol Junqueras, Sánchez cambia el tono y en vez de referirse a ellos como «independentistas» les llama «fuerzas nacionalistas de Cataluña» y avisa que no serán excluídos de las negociaciones.
El candidato de la investidura añadió que el PSOE no va «con un programa cerrado», «singularmente con Unidas Podemos». «Se puede negociar sobre las políticas», concluyó.