Mas entregará CDC a las entidades independentistas para el 27S
El President busca disolver el partido para "poner el turbo" a un independentismo catalán que "ha bajado revoluciones"
Artur Mas ha revelado su propuesta para ganar las elecciones autonómicas del 27 de septiembre: la entrega total de Convergencia Democrática de Cataluña (CDC) al mundo soberanista. «Ésta no será ‘la lista del President’, sino una ‘lista con el President'», ha avisado, en una invitación clara a entidades independentistas como la ANC, Òmnium y la Asociación de Municipios para la Independencia (AMI).
En una conferencia el sábado en Molins de Rei (Barcelona), el líder catalán ha admitido que el suflé soberanista «ha perdido revoluciones» desde la pseudo consulta en Cataluña el 9 de noviembre de 2014. Para reactivarlo, Mas ha avisado que pondrá a CDC «al servicio del país».
El nuevo artefacto político, ha dado a entender, se nutrirá de «activistas» de la ANC, Òmnium y la AMI, entre otros. La liquidación de CDC en este magma se producirá, ha sugerido Mas, aunando a candidatos de todo el espectro independentista, «incluyendo a gente del mundo socialista y hasta a excomunistas del PSUC».
Giro socialdemócrata
Precisamente, el líder soberanista ha escenificado el giro social de CDC tras la traumática ruptura con Unió –su socio durante 37 años– que ha tenido lugar en los últimos días. «¿Podemos tener un país con la educación finlandesa, el paro de Austria o las infraestructuras holandesas? Sí, Cataluña se les parece. Pero sólo si el país lo construye su tronco central: el soberanismo», ha terciado.
Antes, Mas ha lanzado dardos a las nuevas «fuerzas emergentes» como Podemos y Ciudadanos. «El ‘sí se puede’ en las plazas tiene un objetivo muy loable: la justicia social. Nosotros también lo tenemos, pero añadimos las herramientas: el derecho a decidir».
Ruptura con Unió
En lo que respecta a la ruptura con Unió, Mas ha revelado que CDC «nunca ha dado ningún ultimátum» al partido de Duran Lleida. Según él, la formación democristiana se ha partido internamente por la cuestión de fondo que, según él, también divide a la sociedad catalana: «El voto al Sí-Sí –en referencia al 9 de noviembre– u otras respuestas», ha dicho.
En referencia a la separación, el líder soberanista ha rechazado que sea «un divorcio, y a las malas». Según él, «la ruptura no será total», en referencia a los acuerdos que CDC y Unió aún tienen en diputaciones, consejos comarcales y ayuntamientos catalanes.