Mas desafía a Rajoy con un embrión de Hacienda propia
La Generalitat firma un convenio tributario con las cuatro diputaciones catalanas
Artur Mas ha tomado un nuevo impulso, que le puede condicionar en gran medida si, al final, se ve en la obligación de retroceder en el camino.
Un día antes de entrevistarse con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, la Generalitat ha firmado un convenio con las cuatro diputaciones provinciales de Catalunya para establecer una especie de embrión de la Hacienda catalana.
Mas ha firmado el acuerdo con los cuatro presidentes de las diputaciones, todos ellos de CiU: el alcalde de Martorell (Barcelona), Salvador Esteve; el de Vila-Seva, (Tarragona), Josep Poblet; el de Salt, (Girona), Jaume Torramadé; y el de Fondarella, (Lleida), Joan Reñé.
Tras la firma el president ha sido claro: al margen del resultado de la entrevista con Rajoy, en la que le pedirá el pacto fiscal, “Catalunya debe tomar y tomará su camino, porque Catalunya no puede renunciar a su presente y a su futuro”.
El objetivo de Mas es que Rajoy vea en el pacto fiscal “más una solución que un problema”, jugando con el proyecto independentista, impulsado con fuerza desde el propio Govern de la Generalitat después de la manifestación de la Diada.
Estructuras de Estado
El acuerdo con las Diputaciones viene negociándose desde hace meses. La idea es que la Generalitat pueda tener liquidez, gracias a los organismos locales, que son los responsables tributarios de los municipios. Todas las diputaciones tienen un servicio de Hacienda, y algunas de ellas, como la de Barcelona, disponen de recursos, que la Generalitat necesita ahora de forma urgente. El hecho absolutamente novedoso es que, por primera vez, todo el poder local es también de CiU. Esas haciendas locales colaborarán de forma estrecha con la Agencia Tributaria catalana.
Reticencia empresarial
Mas, por tanto, mantiene su compromiso de buscar estructuras de Estado para Catalunya, a pesar de las reticencias de las patronales. Los empresarios tratan de hacer ver a Mas que están por el pacto fiscal, pero no le acompañarán en seguir el camino hacia la independencia.
El president lo comprobó de nuevo este martes en un almuerzo con algunos de los empresarios que más se oponen a ese camino, en un encuentro organizado por Antoni Pont (Borges). Asistieron, entre otros, Ricardo Fornesa (La Caixa); Josep Ferrer (Freixenet); Sebastià Salvadó (RACC); Josep M. Pujol (Ficosa); Juan Echevarría; Joan Uriach (Laboratorios Uriach); Casimiro Molins (Cementos Molins) o Mariano Puig (Puig), según ha publicado La Vanguardia.
Respuesta de Rajoy
El choque de trenes, por tanto, está servido. Porque Mariano Rajoy ha dejado claro en el Congreso, a preguntas de los grupos del PSOE, de UPyD y de CiU, que no está dispuesto a aceptar el pacto fiscal que le reclama Artur Mas. Que hará respetar la Constitución y que los pasos que está dando CiU son «por conveniencia política».
Curiosamente, no ha sido el presidente del grupo parlamentario de CiU, Josep Antoni Duran Lleida, quien le ha preguntado a Rajoy, sino el diputado de la federación nacionalista, Pere Macias.