Mas crea una secretaría para desarrollar una Hacienda propia
El president, Homs y Mas-Colell reclamarán a Bruselas flexibilizar el déficit al 1,5%
El inicio de la legislatura se desea que sea fulgurante. Otra cosa será cómo acaba. El Govern desea actuar en una doble dirección. Si por un lado se muestra favorable al diálogo con el presidente Mariano Rajoy –y este mismo martes se ha abierto una puerta en el acto de inauguración del tramo del AVE hasta Figueres– por el otro se ha puesto en marcha la agenda soberanista pactada con Esquerra Republicana. Y una de las primeras decisiones ha sido la de crear una secretaría para desarrollar una Hacienda propia, adscrita al departamento de Economía.
Artur Mas dudó hasta el último momento. La idea inicial era la de crear un departamento de Hacienda, con un conseller, que podía haber sido Heribert Padrol, uno de los referentes de CiU para constituir a medio plazo una Hacienda catalana. Pero, finalmente, será una secretaría, dentro de Economia. La titular será Georgina Arderiu, que fue en la anterior legislatura secretaria general de Economia, con Andreu Mas-Colell de conseller.
Estructuras de Estado
El Govern ha aprobado este martes el nuevo organigrama, consciente de que debe poner en marcha las “estructuras de estado” que acordó con Esquerra Republicana. La secretaría pretende agilizar el despliegue de la Administración Tributaria de Catalunya, que debería recaudar, liquidar e inspeccionar todos los impuestos que pagan los catalanes. “Dotar de contenido una estructura así no puede ser fruto de la improvisación”, ha asegurado el conseller de Presidencia, Francesc Homs, en referencia a la necesidad de que, técnicamente, todo pueda estar listo en el horizonte de 2014.
Eso sí. Homs ha querido dejar claro que el enfrentamiento que provocará esta decisión no se trasladará a los ciudadanos, y que éstos deberán pagar sus impuestos “donde diga la ley”.
Y la ley, por el momento, no posibilita el deseo del Govern. Según Homs, la potencialidad del Estatut lo permitiría, pero será necesaria una negociación con el Gobierno central, que, por ahora, no se prevé que sea fructífera.
Petición a Bruselas
El otro frente es menos costoso, y puede contar con un apoyo ciudadano claro. El Govern no está dispuesto a que se repita lo que ha ocurrido en el último año. El propio Mas-Colell considera que sería intolerable que una mayor flexibilización del déficit para España no pudiera repercutir en las comunidades autónomas. Y esa puerta se podría abrir en febrero, por parte de la Comisión Europea. El conjunto de las administaciones públicas españolas deben cumplir el 4,5% de déficit establecido para 2013. Si se flexibliza, las autonomías deberían pasar del 0,7% fijado ahora a un 1,5%. Esa es la pretensión de Mas-Colell.
Por ello, y aunque se pretende negociar con el Gobierno central, el Govern quiere hablar directamente con los responsables europeos. Mas desea iniciar ese diálogo directamente con Bruselas. El mismo president, el conseller Homs y Mas-Colell buscarán en las próximas semanas la complicidad europea para disponer de un margen mayor de déficit. Eso permitirá elaborar un presupuesto menos restrictivo para 2013. La diferencia entre un déficit del 0,7% o del 1,5% no es menor. Podría suponer, según el conseller, unos 1.600 millones de euros.