Macro operación contra el narcotráfico en Andalucía

En una operación conjunta de los grupos EDOA (unidades contra el crimen organizado y el tráfico de drogas) de la Guardia Civil de Sevilla y de Cádiz se ha detenido este fin de semana a 17 presuntos miembros de una organización criminal dedicada, desde hacía meses, a introducir hachís procedente de norte de Marruecos en España mediante la utilización de helicópteros habilitados para tal cometido.

Según ha podido saber Economía Digital, la Guardia Civil investigaba a los presuntos «capos» de esta organización desde hacía casi un año.

Desde que se iniciaron las primeras pesquisas, los investigadores detectaron que los presuntos narcotraficantes utilizaban helicópteros para volar desde el sur de Sevilla y desde Cádiz al norte de Marruecos con la misión de recoger la mercancía e introducirla inmediatamente en España y de aquí, distribuirla al resto de Europa. Los vuelos duraban escasamente 50 minutos entre ida y vuelta y los aparatos estaban acondicionados para cargar portes de casi 400 kilos de hachís en cada viaje.

Vigilancias vía satélite

Según fuentes de la Delegación del Gobierno en Andalucía consultadas por este medio, el juzgado de Jerez que instruye las diligencias, dio luz verde a la Guardia Civil para activar el sistema militar de rastreo aéreo denominado Pegaso, que depende del Ministerio de Defensa. Ha sido preciso emplear esa red de radares vía satélite (sólo utilizada en operativos que afectan a la seguridad nacional) para la identificación de las aeronaves que este clan criminal ha manejado desde hace meses y de forma reiterada, con el fin de introducir en España hachís cultivado en las montañas del norte de Marruecos.

Un accidente mortal, precipita las detenciones

Los narcotraficantes solían actuar de noche y a muy baja altura justamente para eludir el control de los radares que controlan el espacio aéreo del estrecho. Se da la circunstancia que hace 15 días y en pleno operativo policial de seguimiento, uno de esos helicópteros que retornaba a España en vuelo rasante, colisionó con una red de alta tensión en una zona perdida de la serranía de Ronda y acabó estrellándose. El piloto, un joven albanokosovar falleció y la Guardia Civil se incautó de más de 300 kilos de hachís en fardos ya preparados para su posterior transporte por carretera.

Detenciones en Sevilla y Cádiz

Se dispararon entonces todas las alarmas y la Guardia Civil, tras meses de secretas investigaciones, decidió precipitar las detenciones en bloque con el apoyo de los grupos de asalto. Así, este fin de semana se ha desarrollado la operación en Sevilla y, fundamentalmente, en Cádiz. En concreto, se ha intervenido en diversas poblaciones situadas en los alrededores de la capital gaditana como por ejemplo El Torno o San Isidro de Guadalete. Ha sido allí dónde se ha producido el grueso de los arrestos. Se trata, en la mayoría de los casos, de ciudadanos españoles con numerosos antecedentes por narcotráfico.

Armas, dinero y tecnología punta

Los agentes policiales se ha incautado, en los más de 10 registros, de armas, munición y abundante cantidad de dinero en efectivo así como de aparatos inhibidores de balizas policiales para el seguimiento de vehículos terrestres o aéreos y de documentación sobre rutas y puntos de almacenaje de la mercancía, tanto en el norte de Marruecos como en España.

Aunque la operación policial no se ha dado por concluida, los detenidos en esta macro redada, pasarán en las próximas horas a disposición del juzgado de instrucción de Jerez que se encarga de unas investigaciones que acaban de ser declaradas secretas.