Los partos de bebés muertos están aumentando durante la pandemia
Varias investigaciones publicadas tras el confinamiento confirman que los partos de fetos sin vida aumentaron por la reducción de los servicios sanitarios
Una de las consecuencias más dolorosas del coronavirus es el aumento de casos de bebés muertos en todo el mundo. Un artículo de la revista científica Nature asegura que durante la pandemia las mujeres embarazadas han recibido menos cuidados médicos de los requeridos debido al confinamiento y al colapso de los sistemas sanitarios de la mayoría de países, lo que ha derivado en esta circunstancia.
Una de las investigaciones que se ha llevado a cabo sobre este tema, liderada por el epidemiólogo Ashish K.C, de la Universidad de Uppsala, en Suecia, ha demostrado que los partos de bebés sin vida incrementaron un 50% entre marzo y mayo en Nepal, meses en los que las medidas de restricción a la movilidad estaban vigentes en la mayor parte del planeta.
Este estudio, el más amplio realizado hasta el momento, se llevó a cabo en hospitales del país asiático entre enero y mayo. Según publicó la revista científica The Lancet en agosto, las muertes pasaron de 14 por cada 1000 nacimientos antes de que el país se bloqueara para detener la propagación del virus a fines de marzo, a 21 por cada 1000 nacimientos a fines de mayo.
La reducción de instalaciones hospitalarias provocó el nacimiento de bebés sin vida
“La reducción del uso de las instalaciones sanitarias comenzó semanas antes del inicio del confinamiento, posiblemente indicando un creciente miedo al contagio de la enfermedad, lo que podría haber hecho que las mujeres no acudieran a los centros médicos”, indican los investigadores en el artículo.
«Lo que hemos hecho es provocar accidentalmente un aumento en los partos de fetos muertos al tratar de proteger a las mujeres embarazadas de la Covid-19”
No obstante, Nepal no es un caso asimilable al de países desarrollados, pero esta circunstancia se ha repetido a lo largo de todo el mundo. Otro estudio publicado en julio por JAMA Network demostró esta mista tendencia en el Reino Unido. Fue en el hospital St George de Londres, donde los casos se cuadruplicaron entre febrero y junio respecto a los tres meses anteriores.
“Lo que hemos hecho es provocar accidentalmente un aumento en los partos de fetos muertos al tratar de proteger a las mujeres embarazadas de la Covid-19”, asegura Jane Warland, una especialista en obstetricia de la Universidad de South Australia, en la ciudad de Adelaida, en declaraciones a Nature.