La viróloga Margarita del Val explica cómo evitar otro confinamiento
La investigadora del CSIC detalla las medidas que serían más eficaces que un confinamiento
El confinamiento ya ha regresado a varios países de Europa y en España, a pesar de que el Ministerio de Sanidad de momento lo descarta, varias comunidades autónomas lo han pedido.
El encierro de la población en sus casas probó en la primera ola ser provechoso para doblegar la curva de transmisión del coronavirus, pero la viróloga Margarita del Val apunta a que en la segunda ola puede lograrse lo mismo sin una restricción tan severa.
«Más vale prevenir que curar», ha señalado la investigadora del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), que en octubre vaticinó los rebrotes de las últimas semanas y que se ha mostrado crítica con medidas como el llamado «toque de queda», ha asegurado que hay alternativas al confinamiento.
«Sigo siendo partidaria, y lo seguiré diciendo hasta que nos confinen, de que lo más importante es que se haga diagnóstico», ha explicado.
Diagnóstico, en la acepción más amplia de la palabra. Es decir, que «se aísle a la persona a la que le han hecho el diagnóstico incluso antes de saberlo«, que «se localice a los contactos y que los contactos se queden en casa preventivamente de cuarentena aunque no les hagan el diagnóstico». La razón es sencilla, según ha apuntado la viróloga: «solo me voy a contagiar una vez en mi vida«.
«Sería mejor porque no pararía la economía»
Es decir, el aislamiento tras el contagio o el posible contagio será una o varias veces, si sucediera que hay una falsa alarma de infección por contactos y se entra en cuarentena ‘en vano’.
«La cuarentena la haré tantas veces como situaciones de riesgo yo tenga, y aprenderé a evitarlas después de dos o tres cuarentenas, pero esto para cada persona son diez días aquí, diez días allá y diez días dentro de cinco meses».
«Es mucho menos que un confinamiento severo», ha insistido. El punto es que, si hubiese una estrategia transversal de diagnóstico desde el rastreo de contactos hasta el vigor de las cuarentenas de positivos sospechosos, los ciudadanos que tendrían que encerrarse por haber tenido situaciones de riesgo pasarán menos tiempo confinados que si el Gobierno decretase otro confinamiento domiciliario de varias semanas.
«Tenemos que ir a diagnóstico, trazado de contactos y respetar cuarentena y aislamiento a rajatabla«, ha sintetizado Del Val. «Esto sería muchísimo mejor porque no pararía nuestra economía y porque no nos afectaría realmente a nuestra salud mental, nuestro estrés, nuestra angustia, a nuestro cansancio».
Margarita del Val anima al teletrabajo
Aunado a una mejor política de diagnóstico, trazado y cuarentena, Margarita del Val también ha sugerido que el teletrabajo debe convertirse en la tendencia dominante en aquellos sectores en los que es posible.
«Está estimado que la tercera parte de los trabajos se pueden hacer en casa. Vamos a hacerlo… si es que acabaremos con esto antes», ha asegurado. «Sería más estable la situación; habría menos montaña rusa y más estabilidad«.
En una entrevista con Navarra Capital, la viróloga del CSIC también ha descrito por qué los bares y restaurantes son «de los sitios más peligrosos» durante la pandemia de la Covid-19, y cómo pueden los empresarios de la hostelería tomar medidas para que esto no sea así.
La investigadora ha hablado de esto en un contexto en el que varias comunidades han cerrado estos establecimientos y otras se preparan para hacerlo o al menos lo estudian.
«Siento decirlo porque somos un país que vive de ello y que lo disfrutamos y que es nuestra vida social: [los bares y restaurantes] son los sitios más peligrosos cuando no están bien ventilados», ha manifestado, «porque no respetamos la distancia y nos quitamos la mascarilla».
En este sentido también ha corregido a los hosteleros por decir que son responsables de muy pocos casos: «solo se conoce el origen del 12% de los contagios», zanjó.
En todo caso, el problema de los bares y restaurantes «se puede corregir con ventilación«, ha dicho. «La hostelería se debería concentrar en revisar sus instalaciones de aire acondicionado y ventilación.
Hay muchas alternativas y creo que las comunidades autónomas deberían apoyar estas renovaciones de los aires acondicionados porque de cara al futuro nos evitarían el coronavirus pero también otros contagios por enfermedades respiratorias».
Cómo ventilar los bares y restaurantes
No se trata de abrir las ventanas de par en par todo el día («esto no nos va a durar todo el invierno»), sino de otro tipo de soluciones, como filtros de aire. «No hace falta» que sean todos del tipo HEPA, que en una pasada eliminan todos los virus; «hay otros que no son tan potentes pero que en varias pasadas van continuamente manteniendo el aire razonablemente libre de virus», ha aconsejado la científica.
«El problema no es que haya un virus suspendido en el aire, sino que se haya concentrado a lo largo del tiempo». Así que otra posible solución es poner medidores de cuánto dióxido de carbono (CO2) hay en el aire, que indicarían que por encima de unos umbrales habría que reducir el aforo o ventilar durante un rato para prevenir contagios.
Al respecto, Margarita del Val ha concluido que «la hostelería tendría que estar mejor informada y quizás en eso es una de las cosas en que hemos fallado un poco, en parte porque la OMS [Organización Mundial de la Salud] no reconoce este modo de transmisión en el que prácticamente todos los científicos estamos de acuerdo. No sé qué está pasando».