La UB vulnera de nuevo la neutralidad al apoyar a un hombre de Puigdemont
La universidad, que ya fue sancionada por su apoyo a los presos del procés, se solidariza con un profesor detenido que es colaborador de Puigdemont
Fachada del histórico edificio de la Facultad de letras de la Universitat de Barcelona / UB
La Universitat de Barcelona vuelve a la carga. La Facultad de Geografía e Historia ha emitido un comunicado de apoyo al detenido Josep Lluís Alay, profesor del centro univesitario. En un breve texto de apenas un párrafo, el centro quiere «expresar todo su apoyo y su solidaridad sobre él y su familia».
El texto muestra sin reservas al jefe de la oficina del expresidente fugado, Carles Puigdemont: «A la espera de tener más información, deseamos que se aclare su situación y que se resuelva favorablemente. Asimismo, reiteran su deseo de que el debate y la discrepancia política se desvinculen de la acción judicial y represiva».
Lo ha denunciado Universitaris per la convivència, una asociación constitucionalista de personal universitario –sobre todo profesores críticos con la politización independentista de la universidad: «Señor decano, ¿puede explicar por qué apoya y se solidariza con un detenido, por muy profesor de la Facultad que sea?».
Señor Decano: ¿puede explicar por qué apoya y se solidariza con un detenido, por muy profesor de la Facultad que sea? pic.twitter.com/kwtOk9OVkN
— Universitaris per la convivència (@univconvivencia) October 28, 2020
La UB: condenada por vulnerar la neutralidad
No es la primera vez que la UB rompe su posición de neutralidad. Ya lo hizo tras la sentencia del procés, cuando el claustro aprobó el Manifiesto de rechazo de las condenas de los presos políticos catalanes y la judicialización de la política. En el documento, exigía «la inmediata puesta en libertad de las personas injustamente condenadas».
Cuatro docentes y un alumno de la institución llevaron lo llevaron a los tribunales por «falta de neutralidad». La justicia les dio la razón: declaró nulo el manifiesto y condenó a la UB a pagar las costas del proceso judicial, que ha ascendido a 600 euros: «La Universidad está sometida al deber de neutralidad».
«En tanto que institución que no articula la participación ni la representación políticas, el deber de neutralidad implica que la Universidad no puede asumir como propia una posición política determinada, y tanto menos cuando esa posición es manifiestamente contraria a los valores y principios del ordenamiento jurídico vigente», explicó la sentencia.
Varios casos de apología independentista en la universidad catalana
Los casos de falta de neutralidad política en las universidades catalanas se suceden. La asociación juvenil S’ha Acabat consiguió que la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) borrara pancartas y murales de apoyo a los presos del procés y la independencia con varios recursos a la Junta Electoral, al vulnerarse la neutralidad del espacio.
Fue en esta misma universidad donde se sucedieron las duras imágenes del boicot a un acto constitucionalista. Jóvenes independentistas radicales intentaron impedir una conferencia en la UAB de S’ha Aacabat con personalidades constitucionalistas invitadas, como Cayetana Álvarez de Toledo (PP) o Maite Pagazaurtundúa (Cs).
