La rebelión fiscal de la Generalitat empieza el 1 de julio
El gobierno catalán estrenará el 1 de julio el portal Espriu desde el que aspira a gestionar tasas que corresponden al Estado, como IVA e IRPF
La Generalitat continúa su labor de promoción de nuevas estructuras institucionales para un hipotético Estado propio. En cinco meses, el 1 de julio, se estrenará el sistema informático que, según el Gobierno de Carles Puigdemont, permitirá recaudar los impuestos que paguen los catalanes, además de aquellos que aspira a arrebatar al Ejecutivo central.
Este programa, bautizado como Espriu, se ha desarrollado durante los últimos 16 meses, según ha revelado este miércoles Lluís Salvadó, secretario de hacienda, en declaraciones a RAC1. Entre los nuevos impuestos que ya esperan recaudar figura el gravamen a las bebidas azucaradas, incluido en los presupuestos de este año.
A ellos, según ha declarado Salvadó, le seguirán la tasa turística, la nueva versión del impuesto a las grandes superficies, el de activos no productivos y el que tasará a los vehículos contaminantes. «Por primera vez pondremos en producción el Espriu con el impuesto de las bebidas azucaradas, que se aplica sobre un censo de contribuyentes de 400 empresas distribuidoras de bebidas. Posteriormente, pondremos en producción otros impuestos», ha adelantado.
A diferencia del anterior sistema –conocido como Gaudí– está «diseñado para impuestos periódicos, de grandes censos de contribuyentes y, en definitiva, para recaudar cualquier tipo de impuesto».
Sobre el reciente escándalo destapado por el exsenador de ERC, Santiago Vidal, ha insistido en que la Generalitat está recopilando una base de datos fiscales «con decenas de fuentes de información, pero siempre a partir de los tributos que ya gestionan y están amparados por la ley«. En este sentido, Salvadó ha asegurado que encargó una nueva auditoría a la Agencia de Protección de Datos de Cataluña para constatar que toda la información fiscal que tiene el Govern está «habilitada» para tenerla.
Recaudación de IVA e IRPF
El departamento que dirige Junqueras asegura que para recaudar IRPF, IVA, el impuesto de sociedades y los especiales no necesitaría la base de datos española, sino que tendría suficiente con que las empresas paguen las cotizaciones de los trabajadores. «Será una base de datos que se construirá a partir de las declaraciones que harán las empresas que, en definitiva, son las que pagan los grandes impuestos que ahora recauda el Estado. No necesitaremos una base de datos específica», ha afirmado.