La jefa territorial de RTVE dimite por el cesarismo de Enric Hernández
La directora de los centros territoriales de RTVE denuncia "ceses y nombramientos" arbitrarios llevados a cabo por el señalado jefe de informativos
La periodista Cristina Ortiz ha renunciado este jueves a la dirección de los centros territoriales de RTVE que ocupaba desde hace casi dos años. Sus desencuentros con el ‘superdirector’ de informativos de TVE, Enric Hernández, han sido la causa de su dimisión, según fuentes conocedoras de la situación.
Según han trasladado a este mediofuentes del ente público, la periodista habría comunicado en un chat interno con los directores de los centros territoriales que abandonará sus funciones en septiembre. Ese mes dará inicio la nueva temporada de TVE, cargada desde ya de polémica por, entre otras cosas, los cambios de horario y formato de los informativos regionales, una decisión de la cúpula de RTVE que buena parte de la plantilla territorial no comparte.
Pero el desacuerdo de Ortiz con la cúpula de RTVE va más allá de la polémica nueva modalidad de los noticiarios territoriales y también responde a una serie de «ceses y nombramientos» arbitrarios en los centros por parte de Hernández, que habrían irritado a la directora por no tomar en cuenta su opinión y actuar sin apenas criterios profesionales. Sería otra de las muchas decisiones de Hernández que contrarían a los empleados.
Las decisiones de Hernández
«No estoy de acuerdo que sea Enric Hernández quien decida ceses y nombramientos en [los centros territoriales], carentes de todo criterio profesional y sin tener en cuenta la opinión de esta dirección», ha lamentado la periodista en un chat interno de directivos de RTVE. Reprocha al director de informativos una serie de nombramientos, presuntamente «en aras de la ‘paz social'», «que en absoluto comparto».
Precisamente, este martes se ha confirmado la destitución de la directora de Radio Nacional de España, Paloma Zuriaga, y del director de informativos, Raul Heitzmann, que según fuentes de la empresa no fueron cesados por motivos profesionales, sino por los planes de Hernández para hacer cambios en las direcciones de los centros territoriales.
«Hasta ahora me he mantenido fiel a mis principios de honestidad, independencia y profesionalidad, y los he aplicado en cada uno de los movimientos que he hecho», ha añadido Ortiz, que cree que seguir fiel a sus principios, «a partir de ahora, va a ser imposible».
En su perfil de Twitter, Ortiz ha colgado un agradecimiento a todos los centros territoriales de RTVE pero no ha hecho mención a su dimisión.
Gracia de corazòn @RTVEGalicia @RTVEMurcia @RTVECantabria @RTVEcyl @RTVEPaisVasco @RTVEAndalucia @RTVEaragon @RTVEBalears @RTVEclm @RTVELaRioja @RTVEMelilla @RTVENavarra @RTVEAsturias @RTVE_Ext @RTVECeuta @RTVECanarias @RTVEValencia
— Cristina Ortiz (@cristinaort_tv) June 30, 2020
Consecuencias de la ‘operación Enric Hernández’
En el chat interno, Ortiz también ha enviado mensajes a algunos compañeros y excompañeros. Ha trasladado, por ejemplo, su agradecimiento a Begoña Alegría, quien fuera directora de informativos de TVE hasta su dimisión en diciembre de 2019, apenas dos meses después del cuestionado nombramiento de Hernández, impulsado desde el Gobierno de Pedro Sánchez a través de la administradora provisional única de RTVE, Rosa María Mateo.
Hernández se hizo con el puesto en septiembre de 2019, cuando la cúpula decidió acuñar el cargo de director de información y actualidad, una suerte de ‘superdirector’ de informativos que estaba por encima de la entonces directora del ramo, la citada Alegría. El Gobierno de Sánchez forzó su nombramiento ante la posibilidad de una repetición electoral en 2019, y desde entonces Hernández ha hecho y deshecho en la cadena.
Cristina Ortiz llegó a la dirección de los centros territoriales después de la primera purga de Mateo en la corporación pública, en agosto de 2018, poco después de su nombramiento. Un nombramiento «provisional» que en las próximas dos semanas cumplirá dos años sin que se haya resuelto aún el concurso público para renovar el consejo de administración de RTVE, rehén de un bloqueo político en el Congreso.
Ortiz se ha despedido de sus compañeros y de los distintos directores territoriales poniendo en valor su trabajo pese a que no sea respetado en la totalidad de la empresa. «Sois un pilar fundamental en esta empresa aunque algunos no lo valoren», expresó a los directores territoriales, en un mensaje en el que se despidió reivindicando la lucha para conseguir «una RTVE independiente».
Hernández intentó calmar la crisis en los centros territoriales hace un par de semanas rectificando sus planes con los informativos regionales en La 1. En vez de pasar su emisión de las 14.00 a las 16.00 horas, como tenía previsto a partir de septiembre, ahora ha cedido a algunas de las demandas de los trabajadores y sindicatos de los centros territoriales y ha decidido emitir en torno a 20 minutos alrededor de las 14.00 horas y otros 20 a las 16.00 horas.
Sigue la guerra entre @PODEMOS y @PSOE por el control de @rtve . La directora de los CCTT d @rtve Cristina Ortiz ( @cristinaort_tv ) anuncia su dimisión (1sept) x diferencias con @Enric_Hernandez ,al q acusa d falta d criterio pic.twitter.com/dflaELFCw5
— Plataforma TVE Libre (@TvPlataforma) June 30, 2020
¿Guerra de partidos?
Este jueves, la plataforma ‘TVE Libre‘, que presuntamente representa al sector crítico del «sectarismo y el odio en RTVE«, anunció en su cuenta de Twitter la dimisión de Ortíz, vinculándola a una «guerra» entre el PSOE y Unidas Podemos «por el control» de la corporación. Este grupo de profesionales se ha preguntado si los partidos del Gobierno de coalición creen que RTVE «es suya».
No obstante, en sus exiguas respuestas a Economía Digital, la directora de los centros territoriales de RTVE, Cristina Ortiz, ha sido explícita respecto de la supuesta «guerra de partidos» para hacerse con el control del ente público. Según la periodista, lo único cierto del mensaje de ‘TVE Libre’ es la noticia sobre su dimisión, aunque la plataforma también se hizo eco de sus críticas por los nombramientos arbitrarios de Hernández.