Crítica demoledora de ‘The New York Times’ a Pedro Sánchez
El periódico 'The New York Times' afirma que su pésima gestión ha situado a España en el epicentro de la crisis
La gestión del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de la crisis del coronavirus está siendo muy criticada a nivel global. The New York Times ha sido el último medio en unirse a estas críticas, al culpar al Ejecutivo de Sánchez de convertir a España en el epicentro de la crisis por «su respuesta vacilante».
El prestigioso diario estadounidense no sale de su asombro al recordar que Sánchez ha declarado el estado de alarma después de permitir el domingo pasado que unas 120.000 personas se manifestaran por el centro de Madrid para celebrar el Día Internacional de la Mujer, que 60.000 aficionados asistieran a un partido de fútbol en el estadio del Atlético de Madrid y que Vox, la tercera fuerza política del país, reuniera a 9.000 personas en la plaza de toros de Vistalegre.
Por este motivo, destaca, España es el segundo país europeo con más casos de coronavirus, después de Italia, y se enfrenta a la propagación más rápida en el continente europeo.
La tasa de contagio más rápida
Entre el pasado fin de semana y este viernes, escribe The New York Times, el número de casos en España se ha disparado, 4.200, con 120 muertes, y Sánchez advirtió que el número infectados podría llegar a 10.000 la próxima semana. “España podría registrar una de las tasas de contagio más rápida de coronavirus del mundo”, advierte el diario estadounidense.
The New York Times insiste en que “la incapacidad” mostrada por el Gobierno de Sánchez para adoptar medidas adecuadas que frenen la propagación del coronavirus se enfrenta a fuertes criticas. Además, subraya, la experiencia de España debe servir de ejemplo para el resto de países en la necesidad de adoptar medidas de prevención que evite la propagación de la enfermedad.
España, tras los pasos de Italia
España está calcando la escalada de infectados que vivió Italia, el epicentro europeo del Covid-19, con diez días de retraso. Si el país transalpino respondió tarde al no calcular la evolución del brote, España contaba ya con la experiencia de lo que les había sucedido a sus vecinos mediterráneos, y aun así, tardó en reaccionar.
Pedro Sánchez ha terminado decretando el estado de alarma este domingo, con el cierre de comercios, salvo supermercados, farmacias y alguna otra excepción. También ha decidido el confinamiento de la población, que solo puede salir para ir a trabajar, a comprar, al médico y poco más. No ha decidido, en cambio, cerrar ninguna región o zona por foco de coronavirus, como hizo China con Hubei, la provincia cuya capital es Wuhan, e Italia con Lombardía, donde se inició el foco en el país.