La directora en funciones de Antifraude no vio nada en el caso Palau
Maite Masià, que substituye provisionalmente a Daniel de Alfonso, apareció en las conversaciones del caso ITV
La normativa de la Oficina Antifraude de Cataluña (OAC) establece que en el caso que sea cesado su director, tal como ha ocurrido esta mañana, cuando el parlamento catalán ha revocado a Daniel de Alfonso, sea substituido provisionalmente por su adjunto, cargo que ocupa Maite Masià.
En la sesión parlamentaria en la que se revocó a Daniel de Alfonso, dos grupos políticos antagónicos como son el PP y la CUP advirtieron que, con su cese, Antifraude quedaba en manos de Maite Macià, vinculada a Convergència, ex alto cargo de la Generalitat y salpicada en el caso ITV.
Piden celeridad en la designación del nuevo director
El popular Santi Rodríguez recordó los antecedentes de Masià y, por su parte, Benet Salellas, de la CUP, pidió celeridad para nombrar un nuevo director cuanto antes. La elección será complicada porque el candidato deberá contar con el voto a favor de dos tercios de la cámara catalana.
Maite Masià fue designada directora adjunta de la OAC a finales de 2014, a propuesta del mismo Daniel de Alfonso, con los únicos votos a favor de CiU y del PSC. El resto de grupos, incluido ERC (actual socio de los convergentes en Junts pel Sí), se opusieron a su nombramiento por falta de confianza.
En 2010, cuando trabajaba en la Generalitat, Masià presentó un informe ante la comisión parlamentaria de investigación del caso Palau en el que constataba que «no hay indicios fehacientes» de que Convergència se haya financiado irregularmente a través del Palau de la Música. Posteriormente, el juez instructor embargó la sede central del partido como garantía de una fianza de 3,2 millones de euros por su presunta responsabilidad en el caso Palau.
El nombre de Maite Masià también aparecía en las conversaciones del caso ITV. Cuando ocupaba el cargo de directora del Instituto Catalán de la Energía (ICAEN), de marzo de 2011 a noviembre de 2014, habló con Sergi Alsina, inculpado en el caso ITV y por aquel entonces amigo íntimo de Oriol Pujol. El motivo de la conversación era la tramitación de una subvención del ICAEN, que es un organismo del departamento de Empresa de la Generalitat.