La demanda de petróleo cae ante el auge del coche eléctrico
La Agencia Internacional de la Energía fija, por primera vez, un plazo para el pico en la demanda de petróleo: a mediados de la década de 2020
Los coches eléctricos ya comienzan a desplazar en grandes cuantías la demanda de petróleo para automóviles. Por segundo año consecutivo, la Agencia Internacional de la Energía (AIE) revisó al alza su perspectiva de uso de energías renovables en el futuro, a la vez que señaló por primera vez fijo un plazo en el que podría ocurrir el pico en la demanda del petróleo.
El informe anual Perspectiva energética mundial que la AIE publicó esta semana recoge, como siempre, su análisis de la demanda futura y el suministro de combustibles y electricidad a nivel mundial. Pero también revela que «el uso de petróleo para automóviles alcanzará su punto máximo a mediados de la década de 2020».
No obstante, «los productos petroquímicos, camiones, aviones y barcos aún mantienen la demanda global de petróleo en una tendencia al alza», dice el documento. «Las mejoras en la eficiencia de combustible en la flota de coches convencionales evitarán una demanda potencial tres veces mayor que los 3 millones de barriles por día desplazados por 300 millones de coches eléctricos en la carretera en 2040», agrega.
La demanda de petróleo ya disminuye en ciertos mercados
La demanda de petróleo para el transporte ya disminuye en muchos mercados y segmentos, y esa es una de las razones por las que la AIE se muestra tan optimista respecto al futuro. Ejemplo de ello son los autobuses, como bien señala Bloomberg. A finales de 2018, los autobuses habrán desplazado alrededor de 233.000 barriles de demanda de petróleo por día.
Otro factor de transformación es, naturalmente, la proliferación del coche eléctrico, que ya desplaza 279.000 barriles de petróleo por día. Entre los autobuses y los coches eléctricos ya se han desplazado este año más de medio millón de barriles de petróleo diarios, y no se espera que la tendencia vaya a mermar pronto.
En Alemania, la demanda de diésel ha caído un 9% en los primeros seis meses del año, y las medidas políticas que se están tomando ayudarán a aumentar el porcentaje aún más. En Italia, la demanda de gasolina disminuyó en casi la mitad en los últimos 13 años, aunque este año se estancó en niveles similares durante todo el ejercicio.