La CUP pedirá la dimisión de Núria Parlon como vicepresidenta de la Diputación en cada pleno
La formación anticapitalista considera innecesaria la contratación del socialista Antoni Fogué, expresidente de la corporación provincial, en el puesto de asesor técnico de la gerencia
Desde que la socialista Núria Parlon fue designada en agosto pasado vicepresidenta quinta de la Diputación de Barcelona, los tres diputados provinciales de la CUP han pedido en cada pleno su dimisión, lo volverán a exigir en el convocado para el próximo 23 de diciembre y, así, hasta que finalice el mandato en 2019.
Quim Duran, diputado provincial de la CUP, precisa que no se oponen a que Parlon tenga una vicepresidencia, sino al hecho que se la haya nombrado para este cargo sin atribuciones y, por lo tanto, exigen «que se le den atribuciones o que se vaya» porqué «está cobrando sin hacer nada».Su sueldo es de 6.367,74 euros brutos mensuales por catorce pagas, o sea, 89.148 euros brutos anuales. Núria Parlon también es la alcaldesa de Santa Coloma de Gramenet y la viceprimera secretaria del PSC.
La actual presidenta de la Diputación de Barcelona, la convergente Mercè Conesa, argumentó en su momento, para justificar el cargo de Parlon, que es «tradición de la casa» que un representante del primer partido de la oposición ostente una vicepresidencia. En este sentido, Quim Duran avanza que la CUP también ha instaurado la «tradición» de pedir en cada pleno su dimisión mientras no se le den atribuciones.
Antoni Fogué continúa en la Diputación
En el pleno del 23 de diciembre, el último del año, la CUP insistirá en la dimisión de Parlon y se están planteando si pide también la del socialista Antoni Fogué como asesor técnico de la gerencia de la Diputación, cargo para el que fue nombrado por la presidenta, Mercè Conesa, en agosto pasado con un sueldo cercano a los 90.000 euros brutos anuales, según se apunta desde la formación anticapitalista.
Antoni Fogué es el actual secretario de política municipal del PSC y, en el pasado, fue presidente de la Diputación de Barcelona (2008-2011), vicepresidente cuarto de esta corporación en el anterior mandato (2011-2015) y concejal de Santa Coloma de Gramenet, municipio de donde es alcaldesa Núria Parlon y, antes que ella, Manuela de Madre, histórica dirigente socialista que, precisamente, es la esposa de Fogué.
Quim Duran considera innecesaria la contratación de Fogué para asesorar la gerencia de una institución que cuenta con centenares de técnicos en plantilla que pueden ejercer esta función. En cambio, la convergente Mercè Conesa esgrime la «experiencia» del dirigente del PSC. Desde la CUP se apunta que Conesa, que forma gobierno con ERC, premia el apoyo del PSC, que ha votado a favor de su investidura y de los presupuestos.
Aumenta el número de asesores
La CUP es el único grupo de la Diputación de Barcelona que, por propia decisión, prescinde de contratar asesores. El resto de grupos los sigue incorporando. La mayoría de estos colaboradores son políticos que continúan trabajando para el partido y que se han quedado sin cargo electo.
En agosto pasado, la Diputación de Barcelona publicó el nombramiento de los primeros 37 asesores, a los que en los meses siguientes se han sumado unos cuantos más. La última incorporación, efectuada en noviembre, es la de Pia Bosch como asesora de Esquerra.
Pia Bosch era una destacada dirigente de los socialistas de Girona hasta que, en abril de 2014, abandonó el partido para ingresar en el Moviment d’Esquerres (MES), aliado d’ERC en las municipales y de Junts pel Sí en las últimas autonómicas. Bosch ha sido delegada de la Generalitat, diputada al Parlament, jefa de la oposición en el Ayuntamiento de Girona la pasada legislatura y, también, portavoz socialista en la Diputación, pero no en la de Barcelona, sino en la de Girona.