La corrupción de Convergència salta de Pujol a Mas
La Operación Pika que se desencadenó este jueves con más de veinte registros impacta en el entorno íntimo del líder del PDECat
Artur Mas ha recibido un nuevo misil judicial en su línea de flotación. Cuatro días antes de ser juzgado por la consulta independentista del 9N, la Fiscalía Anticorrupción y la Guardia Civil, por orden del juez del caso del 3%, han actuado en su entorno íntimo para recabar pruebas sobre la financiación irregular de Convergència.
Entre los protagonistas de la Operación Pika, desencadenada este jueves con más de una veintena de registros, destacan Sixte Cambra, presidente del Puerto de Barcelona; Antoni Vives, ex concejal de Urbanismo de Barcelona; y Francesc Sánchez, ex coordinador de Convergència. Todos ellos son amigos y colaboradores.
Cambra y Mas van en el mismo barco
Con Sixte Cambra, Artur Mas suele hacer salidas a la mar en compañía de sus respectivas esposas. Forma parte de su círculo de amistades más íntimo. Fue precisamente Artur Mas quien impuso que el ex senador Cambra presidiera la Autoridad Portuaria de Barcelona. El fiscal Fernando Bermejo registró su despacho y las oficinas de esta empresa pública durante todo el día (en el momento de cerrar esta información Cambra todavía no había finalizado la operación) a la búsqueda de documentación sobre obras.
Antoni Vives fue uno de los principales colaboradores de Artur Mas en los últimos gobiernos de Jordi Pujol. Ocupó entre otros cargos la secretaria de Planificación Económica y la secretaría del gobierno de la Generalitat. Fue teniente de alcalde de Urbanismo con el alcalde Xavier Trias. Abandonó la política en 2015 poco antes que trascendieran turbios asuntos sobre su gestión al frente de las empresas municipales.
Minuciosos registros en el Puerto y en Bimsa
Los registros policiales más minuciosos se realizaron en el Puerto de Barcelona y en Bimsa. Los agentes buscaban documentación sobre contratos públicos porque sospechan que de ellos se derivaron supuestas comisiones a fundaciones y entidades del entorno convergente. La Operación Pika se desencadenó a partir del cruce de datos que figuraban en las agendas de Xavier Tauler, ex directivo de Copisa que también está imputado en el caso Pujol, y de Andreu Viloca, ex tesorero del partido de Artur Mas. Este último fue detenido este jueves por segunda vez. En octubre de 2015 paso veinte días en prisión provisional.
En el caso de Vives, supuestamente se le investiga por las obras del túnel de la plaza de las Glòries de Barcelona. La adjudicación se realizó en febrero de 2015, tres meses antes de las elecciones municipales que apartaron a Xavier Trias de la alcaldía. El concurso lo ganó una unión temporal de empresas formada por Comsa-Emtge, Copisa, Rogasa y Benito-Arnó. Los agentes también registraron la sede de esta UTE.
Por lo que se refiere a Cambra, ls agentes se interesaron por diversos contratos del Puerto de Barcelona. Una de las obras, de ampliación de un muelle, fue adjudicado a la UTE integrada por Coposa, ACSA y Benito Arnó. También se registró su sede. No es la primera vez que se sospecha de Cambra por su gestión en el puerto.
El PDECat atribuye la operación al juicio por el 9N
Los dirigentes del PDECat, la formación heredera de la vieja convergencia atribuyeron la operación policial de este viernes a la proximidad del juicio del 9N contra Artur Mas, Irene Rigau y Joana Ortega. Los tres intervendrán a primera hora de este viernes en la tertulia matinal de Catalunya Ràdio que conduce Mònica Terribas. Con toda seguridad, se centrarán en el juicio del lunes donde se jugarán su inhabilitación. Artur Mas siempre ha intentado pasar de puntillas sobre el famoso 3%.
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau (BComú), ha abierto una investigación interna para recopilar toda la documentación sobre la empresa municipal Bimsa y las obras que contrató el consistorio durante la etapa de Xavier Trias.