La cita fallida de Torra y el Rey envenena el primer encuentro con Sánchez
Moncloa veta la reunión que Torra quería mantener con Felipe VI y el Govern mantiene el pulso con la Corona mientras ultima la cita entre el president y Sánchez
El pulso que el presidente de la Generalitat ha planteado a la Casa Real está envenenando los preliminares de la primera reunión entre Quim Torra y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que este mismo miércoles se ha fijado para el 9 de julio. El Rey, en cambio, no se reunirá el viernes en Tarragona con Torra, como le había solicitado por escrito este mismo miércoles el presidente de la Generalitat. Pero no por decisión del monarca, sino de Sánchez, que ha vetado el encuentro.
La Generalitat lleva días amagando con la posibilidad de que Torra dé plantón a Felipe VI en el primer acto en el que está previsto que coincidan el monarca y el president: la inauguración de los Juegos Mediterráneos, que se celebran en Tarragona. Pero el Govern, más allá del terreno dialéctico, se resiste a confirmar un portazo al monarca que, al menos a efectos de relato, no parecería muy coherente con las apelaciones de Torra y su ejecutivo a ese diálogo que esgrimen continuamente desde hace semanas como principal horizonte moral y estratégico.
Reproches y petición
Este miércoles, la Generalitat intentó trasladar la pelota al tejado del rey con el envío de una carta firmada por Torra y por sus antecesores Carles Puigdemont y Artur Mas, en la que le reprochan al monarca su discurso del 3 de octubre, cuando avaló sin fisuras la respuesta del gobierno de Mariano Rajoy a la celebración del referéndum ilegal del 1-O, incluídas las violentas cargas policiales con las que fue reprimido.
En la misiva se le afeaba al rey aquel discurso y, en una postdata firmada ya en solitario por Torra, se le pedía que aprovechara la visita a Tarragona para encontrar un hueco para mantener una reunión. «Tenemos que hablar», insistía Torra.
Torra ni siquiera esperó a la confirmación oficial de la negativa de La Moncloa para replicar
La Casa Real dió acuse de recibo de la carta e informó a la Generalitat de que la trasladó al Gobierno, siguiendo «el procedimiento habitual», precisaron fuentes de la Zarzuela, que recordaron que el artículo 64.1 de la Constitución dice que «los actos del Rey serán refrendados por el presidente del Gobierno y, en su caso, por los ministros competentes».
Torra ni siquiera esperó a la confirmación oficial de la negativa de La Moncloa para replicar. Tuvo bastante con la información que avanzó al respecto La Vanguardia para reaccionar vía Twitter: «Una cuestión», escribió el president: «Si el rey el día 3 de octubre hizo el discurso que hizo, autorizado por el Sr. Mariano Rajoy, ¿ahora por qué el Sr. Pedro Sánchez no lo autoriza a hablar con el presidente de Cataluña? ¿Queremos diálogo o no queremos diálogo?»
Mantener la tensión
El Gobierno suavizó la negativa anunciando finalmente la fecha del primer encuentro entre Sánchez y Torra, fijada para el 9 de julio a las 11.30 en La Moncloa. Pero el Govern quiere seguir manteniendo la tensión respecto de la Corona, al cabo, la institución peor valorada en Cataluña si hacemos caso de las encuestas del Centro de Estudios de Opinión (CEO) de la Generalitat.
Pese al portazo, el Ejecutivo de Torra sigue sin aclarar si el presidente acudirá el viernes a Tarragona o dará plantón al rey, como le pide la CUP, que este miércoles le pidió a Torra, también por carta, que no participe en «la farsa» de los Juegos Mediterráneos.
Antes conocer la respuesta a la carta de Torra, Puigdemont y Mas, fuentes de la Generalitat insistían en que la decisión se tomaría el jueves y que una eventual negativa del rey a mantener la reunión solicitada no necesariamente tendría por respuesta un plante. Y la portavoz del Govern y consellera de Presidencia, Elsa Artadi, decía en TV3 que, aunque Torra asista, seguirá sin dar «por normalizada» la relación con Felipe VI.
Torra cuenta con que tendrá más ocasiones de evidenciar la tensión entre la Generalitat y la Casa Real
Torra cuenta con que tendrá más ocasiones de evidenciar la tensión entre la Generalitat y la Casa Real. La semana que viene, sin ir más lejos, el monarca también visitará Cataluña, para presidir la entrega de los premios Princesa de Girona, y de nuevo en este caso el Govern se niega a revelar si habrá plante.
Los premios se otorgarán en el centro de convenciones de El Celler de Can Roca en la localidad gironina de Vilablareix porque la alcaldesa de Girona, la neoconvergente Marta Madrenas, se ha negado a ceder ningún espacio municipal para celebrar la ceremonia.