10-N: Mossos vs CDR en los colegios electorales
Las fuerzas de seguridad prevén blindar puntos de votación e incluso atrincherarse en algunos para evitar la ocupación de los CDR el día de las elecciones
Los Mossos han detectado un plan de los autodemoninados Comités de Defensa de la República (CDR) para alterar la jornada electoral del 10 de noviembre y atemorizar a los votantes constitucionalistas. Para ello, ya han elaborado un plan para hacer frente a los actos programados por la organización independentista en la jornada de reflexión como el día de la elecciones.
Este plan, según recuerdan fuentes policiales, es similar al que estaba previsto que realizaran los Mossos el 1 de octubre de 2017, pero que finalmente no fue concretado por los agentes autonómicos. Debido a este precedente, las fuerzas policiales temen que el presidente de la Generalitat, Quim Torra, pretende manejar a su conveniencias a los actuales responsables de los Mossos y poner en riesgo la seguridad de la jornada.
Los servicios de información e inteligencia han detectado también que la plataforma de Tsunami Democrátic prevé realizar una acción de protesta el próximo 9 de noviembre, día de reflexión previo a las elecciones del 10-N, y en que se prevé otra jornada de protestas, caos y violencia. “Hagámoslos reflexionar” es el lema elegido para desobedecer a la Junta Electoral Central que prohíbe la realización de actos de campaña en ese día.
Los Mossos blindan los colegios frente a los CDR
Los planes de los Mossos -en los que participarán agentes de las Unidades de Intervención de la Policía Nacional– incluyen el blindaje de los colegios catalanes preparados para la votación. Así lo han informado varias fuentes a El Mundo.
La actuación tendrá inicio el viernes 8 de noviembre y consistiría en dos líneas: poner en marcha un dispositivo de seguridad en los accesos a los recintos y otro de distintas características en recintos escolares que tienen más complejidad para desplegar un preventivo; en estos últimos casos se encerrarán dentro de los colegios efectivos policiales para evitar la ocupación por parte de los CDR.
Según las investigaciones policiales, los radicales ya han estudiado y planificado todas las actuaciones que se prevén con el objetivo de atemorizar a la población y amedrentar los votantes que no estén a favor de la independencia de Cataluña. «Se trata del matonismo, de trasladar la imagen de que controlan las calles y de que frenarán a los que no son de los suyos», apuntan los policías.
Sin apoyo de la Generalitat
El planteamiento de los Mossos está elaborado con el visto bueno de los responsables de su actual cúpula y se ha realizado a pesar de que Torra no ha dudado en cuestionar el papel de la policía de la Generalitat en las últimas semanas.
Estos actos no son más que la prolongación de numerosas jornadas de actos programados por organizaciones independentistas que han finalizado con violencia y vandalismo. Según los analistas, la respuesta a la sentencia del procés no se limitaba a los primeros días posteriores, sino que había la intención de llevar a cabo un amplio calendario «de actividades».
El Gobierno, de momento, en previsión de las elecciones del 10 de noviembre y de la visita del Rey este lunes, ha enviado a otros 300 agentes antidisturbios de la Policía Nacional. Además, el Ministerio del Interior mantiene aún acuartelados a casi un millar de agentes de la Guardia Civil que hasta la fecha apenas han tenido que intervenir, únicamente en la protección de infraestructuras esenciales del Estado.
Además de esa jornada, la plataforma tiene previstas otras acciones en los dias posteriores a los comicios, entre estos el 18 de diciembre, día en que se tiene que disputar el partido entre el FC Barcelona y el Real Madrid.