Iglesias huye del ofrecimiento de Cs para pactar los presupuestos
"Estamos en las antípodas ideológicas", dice para definir la distancia que hay entre el Gobierno y Ciudadanos
Pablo Iglesias no quiere que Ciudadanos se arrime al Gobierno y, por el contrario, quiere recomponer en algún momento el bloque de la investidura que se alzó con ERC como pieza fundamental. Después de que Oriol Junqueras haya emplazado al Gobierno de Pedro Sánchez a elegir entre Ciudadanos y los soberanistas, una vez consumado el apoyo de Inés Arrimadas a la cuarta prórroga del estado de alarma, el vicepresidente segundo del Ejecutivo subrayó que Cs sigue «en las antípodas ideológicas» del programa de gobierno de PSOE y Unidas Podemos. Y así intentó rehacer el hilo con ERC.
El líder de Podemos aseguró sobre el partido de Inés Arrimadas que «es evidente que no podrían gobernar con nosotros», pues son «una fuerza política que gobierna con el PP y con Vox«. A pesar de ello, consideró que Cs ha «tenido la altura política de ponerse de acuerdo con el Gobierno de España en un asunto en el que la gente está pidiendo acuerdos entre el Gobierno y la oposición» y, por ello, dijo que «lo que hay que hacer es darle las gracias».
Iglesias hizo estas declaraciones después no solo del acuerdo del Gobierno con Cs y de los reproches de ERC por su acercamiento a la formación naranja, sino también en un momento en el que los de Arrimadas se abren a pactar también unos Presupuestos Generales del Estado con motivo de la crisis económica que ha impulsado el coronavirus. El ofrecimiento no entusiasma al vicepresidente segundo, que se apresuró subrayar que las posiciones de Cs siguen «tan lejos de nosotros» como nunca.
Descarta que Podemos salga del Gobierno
Iglesias confía en que la coalición de izquierdas seguirá intacta tras superarse la crisis sanitaria del coronavirus. Ante la creciente desazón de algunos sectores con las políticas moradas a su paso por la Moncloa, el también ministro de Derechos Sociales y Agenda 2030 dijo que cree que «algunos han confundido sus deseos con la realidad» y ha rebajado las presiones sobre el Ejecutivo a que «una parte de la derecha mediática» tiene «intenciones legítimas» de desplazarle del Ejecutivo, pero éstas no tienen recorrido.
«Claro que a las élites no les gusta que Unidas Podemos esté en el Gobierno, pero que piensen que esos deseos se puedan convertir en realidad a través de editoriales o a través de declaraciones creo que revela cierta miopía», manifestó. Apunta Iglesias que «este Gobierno es el resultado de dos cosas: un acuerdo programático y una voluntad política, y de una correlación de fuerzas clarísima, que todo mundo puede ver. A partir de ahí, ¿nosotros qué podemos hacer como Gobierno? Pues, tenderle la mano a todo mundo».
Sobre las discrepancias a lo interno del consejo de ministros entre las posiciones socialistas y las de su partido, comentó que «somos un Gobierno de coalición y, si la pregunta es si discutimos a veces, claro que sí; cómo no vamos a discutir». «Seríamos irresponsables si tuviéramos el piloto automático», explicó, señalando que la experiencia de la coalición ha servido para «cerrar filas» y «tejer confianzas», y para ser «un Gobierno con muchas voces pero con una sola palabra».