Hortalà: “El problema catalán no tiene solución, es cíclico”
Hortalà, el presidente de la Bolsa de Barcelona, cree que el problema catalán se deberá “administar” a partir del 2-O, con cesiones por parte de todos
Joan Hortalà conoce los artimañas de todos los partidos políticos en los últimos treinta años. Fue secretario general de Esquerra Republicana, y tiene ahora un sentido de la realidad que le lleva a asegurar que “el problema catalán no tiene solución, sólo se puede administrar”.
Lo dice ahora, como presidente de la Bolsa de Barcelona, con otro símil, desde el conocimiento económico. “Como nos enseñó Schumpeter, la economia tiene ciclos económicos, y los economistes intentan administrarlos. En el caso de Cataluña se puede aplicar perfectamente. Cada cierto tiempo, la relación con España sufre altibajos. De lo que se trata ahora es de administrar el problema a partir del 2 de octubre, con cesiones por parte de todos, que pasará, desde Cataluña, por renunciar a planteamientos maximalistes, y desde Madrid a desimputar y negociar”.
Después de la tensión, el 2 de octubre, se deberá negociar, para ‘administrar’ el problema
Hortalà, en una entrevista en el programa Converses, de la Cadena Cope, con la participación de Economía Digital, ha lamentado este sábado lo ocurrido en el Parlament con la aprovación de la ley del referéndum y la ley de transitoriedad jurídica. Asegura que la presidenta de la cámara, Carme Forcadell, no ha estado a la altura, y que a los cargos políticos se les debe pedir “un mínimo”. Según Hortalà, Forcadell “ha sido una buena activista como presidenta de la ANC, pero como presidenta del Parlament se le debe exigir un mínimo”.
La idea de Hortalà es que en las próximas semanas aumentará la tensión y que sólo se debe esperar, con cierta frialdad, al día después del referéndum del 1 de octubre. Al margen de lo que ocurra, el presidente de la Bolsa de Barcelona es partidario de iniciar una negociación que, sin llegar a grandes cambios, –a corto plazo—se pueda “administrar” el problema para que no perjudique al conjunto de la sociedad catalana. Su idea se aproxima a la de Ortega y Gasset, cuando en la República abogó por la «conllevancia» entre Cataluña y España, al entender que el problema era «insoluble».
El problema catalán, ni para bien ni para mal, no cotiza en los mercados
A juicio de Hortalà, sin embargo, el proceso sobiranista y la tensión acumulada no está afectando a los mercados, porque “ni para bien ni para mal no cotiza en los mercados. Otra cosa será la situación de una u otra empresa, con sede en Cataluña, pero los inversores se mueven por otras circunstancias y por ahora no ha ocurrido nada”.
Hortalà afirma que la bolsa española está experimentando un buen comportamiento a lo largo del año y que a finales de 2017 podría recuperar los 11.000 puntos, lejos, en cualquier caso de los 16.000 que alcanzó el IBEX antes de la crisis.