Hacienda reserva 5.775 millones para Catalunya
La Generalitat asegura que precisará una cantidad menor e insiste en que no deberá presentar grandes cambios en sus cuentas para acceder al FLA
El Ministerio de Hacienda es consciente de los problemas de liquidez de las comunidades autónomas, aunque hasta ahora no ha intentado poner en marcha algunas medidas que le pedía, por ejemplo, el gobierno catalán, como los hispabonos. Y, vista la imposibilidad de que Catalunya pueda acceder a los mercados para financiarse, -el propio Reino de España lo tiene ahora muy complicado- ya tiene reservados 5.775 millones de euros, del total de 18.000 millones del que dispone el Fondo de Liquidez Autonómico (FLA).
Esa es la cantidad que necesita Catalunya de aquí hasta final de año para financiarse. El Govern, sin embargo, sigue actuando con mucha cautela, analizando la letra pequeña del FLA y con el convencimiento de que precisará una cantidad inferior.
Una petición de 3.500 millones
Las cifras que algunas fuentes financieras y políticas están considerando oscilan entre los 3.000 millones y 3.500 millones, teniendo en cuenta que la administración catalana necesita para noviembre unos 2.600 millones para pagar el vencimiento de una emisión de bonos particulares, conocidos en su momento como bonos patrióticos.
El gobierno catalán de CiU sigue apuntando un hecho que no ofrece dudas. Y es que fue el Govern quien de forma reiterada reclamó al gobierno central alguna fórmula para ofrecer liquidez a las comunidades autónomas, visto y comprobado que los mercados están cerrados. Descartados los hispabonos, el gobierno que preside Mariano Rajoy, ha acabado por ofrecer un crédito a través del denominado FLA, que ha acabado siendo, en la práctica, una especie de ‘rescate’.
Más controles
Pero, ¿habrá más condiciones y exigencias? Una fuente consultada considera que no necesariamente, más allá de si las cuentas que debe presentar la Generalitat se exigen cada mes, en lugar de trimestralmente. Hacienda está encima y el control será mayor, porque desea que se cumplan todos los requisitos para acceder al crédito, pero esa exigencia ya se lleva practicando en los últimos meses, se asegura. En la práctica supone, en todo caso, que los gobiernos autonómicos no dependen de ellos mismos.
El problema de fondo es si esa ayuda se acabará trasladando en el tiempo, vistas las expectativas de los próximos meses. Si el gobierno central y, posteriormente, las autonomías no pueden acceder a los mercados internacionales, el problema será que el rescate para el conjunto del Estado podría estar muy cerca.
Intervención real
Por ello, aunque se trate de un ‘rescate’, por parte del gobierno central, de las autonomías, la intervención real, la que puede vaciar de contenido político a las comunidades autónomas, tiene otro proceso. Si las autonomías incumplen los planes de déficit, del 1,5% para 2012, y no realizan los ajustes que se les piden, podrían ser intervenidas, después de una votación en el Senado que precisa de una mayoría absoluta.
Hasta ahora, ninguna comunidad ha pasado por esa situación.