Estudiantes, contra el ‘ministro de Colau’ por atacar a los Erasmus
Manuel Castells frivolizó con la situación "atípica" de muchos estudiantes, que tuvieron que volver a España dejando sus pertenencias en varios países
Los estudiantes claman contra el ministro de Universidades, Manuel Castells, de la confianza de Ada Colau, por criticar a los alumnos que se fueron de Erasmus por el coronavirus y dejaron todo el material que necesitaban para aprobar en sus lugares provisionales de residencia.
El miembro del gabinete de Sánchez aseguró que muchos de ellos «se fueron alegremente con sus familias o a lugares más divertidos que en el lugar en el que estudiaban» y ahora no tienen sus apuntes.
La crítica, que hace la Coordinadora de Representantes de Estudiantes de Universidades Públicas (Creup), se producen en medio de las peticiones de muchos jóvenes de poder volver a su piso o residencia de estudiante para recoger su portátil, sus apuntes y libros para preparar los exámenes, todo lo que dejaron al iniciarse el estado de alarma.
#QuieroMisApuntes
La etiqueta de #QuieroMisApuntes de la Creup ha selañado que «ni el tono ni el fondo del mensaje de Castells fue el apropiado», puesto que se mostraba al colectivo como un «agente superficial e infravalorando una situación atípica, extraordinaria y perjudicial». Los estudiantes justifican que la restricción de movimiento para poder recoger lo necesario y continuar con la docencia telemática y su posterior evaluación es algo que «nadie podía imaginar».
La Creup -asociación estatal que representa a más de un millón de estudiantes de 35 universidades públicas- lamenta que no se contemple hasta la fase III de desescalada los desplazamientos para recoger los materiales de estudio. Han opinado que ello no supondría «un riesgo de salud pública, pueden realizarse de forma ordenada y escalonada a través de solicitudes a las propias universidades».
Uno de los casos de alumnos afectados es el de Ignacio Pérez, un joven de 23 años que estudia arquitectura en ETSAM y se fue de Erasmus a la Università degli studi di Ferrara. En declaraciones a Economía Digital, expresaba su preocupación por no saber si podrían regresar, así la inquietud por pagar alquileres: «no sabemos qué va a pasar con eso».
«El Gobierno no nos ha dado ninguna información y directamente sentimos un abandono absoluto aún teniendo un ministerio creado para las universidades», lamentaba. Pérez explicaba que algunas de las decisiones que tenían sobre la mesa era que los caseros enviaran por correo los materiales: «Eso no es razonable, hay cosas de valor allí y no hay confianza con esa gente».
Bajada de tasas
En paralelo a todo esto, el ministro de universidades quiere un gran pacto entre el Gobierno y comunidades autónomas para bajar los precios universitarios a niveles de 2012, aunque para ello los distintos Ejecutivos regionales se exigen algo obvio: más financiación para poder asumir el sobrecoste por bajar tasas.
El ministro de Ada Colau ha planteado en dos ocasiones este jueves –en la Conferencia General de Política Universitaria (CGPU) y la Comisión de Universidades del Congreso– este jueves que educación superior en España baje a los precios previos al sistema de tasas impuesto por José Ignacio Wert y quiere que la primera matrícula para el grado vuelva a niveles del curso 2011-2012.
«Si bien es necesario aumentar los recursos de las universidades, no es equitativo que se produzca a costa de las matrículas que tiene que pagar el estudiante y sus familias, particularmente en un momento de tanta penuria económica«, ha recalcado. Castells quiere llegar a un «mínimo consenso» con las autonomías en un plazo máximo de diez días y les ha pedido que les hagan llegar una especificación de lo que necesita cada una para frenar «la disparidad gigantesca».