Estudiantes independentistas secuestran la universidad catalana
El sindicato estudiantil independentista convoca una huelga indefinida en las universidades catalanas a partir del 29 de octubre
Los estudiantes universitarios de Cataluña que no se reconocen en la causa independentista lamentan cada vez más que los centros de estudio limiten sus derechos en favor de los huelguistas separatistas, que en algunos casos gozan de facilidades por su militancia y participación en las protestas, como sistemas alternativos de evaluación que les permiten ausentarse de los exámenes si creen que es más importante reivindicar la libertad de los políticos presos o el derecho a la autodeterminación.
En entrevista con Economía Digital, la estudiante de Ciencias Políticas y Derecho y presidenta del colectivo S’ha Acabat!, Julia Moreno, ha afirmado que «las universidades forman parte del engranaje de la Generalitat y nos vemos desamparados por el gobierno autonómico». Y las decisiones tomadas por algunos centros educativos, así como las constantes movilizaciones en las que se han involucrado muchos estudiantes, le dan la razón: el procés ve en la universidad catalana un semillero independentista.
La relación es recíproca: los estudiantes movilizados contra la sentencia y a favor de la autodeterminación tienen carta blanca en las universidades catalanas. Si hace una semana se han decretado tres días de paros, que coincidieron tanto con la huelga general del 18 de octubre como con la primera serie de disturbios en las ciudades catalanas, ahora el asunto irá a más. Esto, porque el Sindicato de Estudiantes de los Países Catalanes (SEPC) ha convocado huelga indefinida en las universidades a partir del martes 29 de octubre.
La convocatoria ya recoge un paro en los institutos los días 30 y 31 de este mes. El SEPC ha convocado las huelgas, nuevamente, en protesta por la sentencia, pero también pare denunciar la «represión» contra los jóvenes. «No paremos hasta conseguir nuestras demandas. ¡Los centros serán siempre nuestros!», ha afirmado el sindicado en las redes sociales. «Vivimos un momento histórico, una revuelta popular sin precedentes, y los estudiantes seremos la punta de lanza una vez más», ha remarcado.
#VAGAINDEFINIDA | 🔴 Caminem cap a la vaga indefinida a universitats i per al 30 i 31 a secundària.
👉🏿 No aturarem fins aconseguir les nostres demandes. Els centres seran sempre nostres!
✊🏾 Tornarem als carrers, camp de batalla dels moviments populars.#EstudiantsHoAturemTot pic.twitter.com/9XeKOL2nfk
— SEPC (@SEPC_nacional) October 26, 2019
Evaluación alternativa para estudiantes independentistas
La huelga indefinida de los estudiantes tendrá lugar después de que esta semana el SEPC y Arran (las juventudes de la CUP) exigieran la dimisión de todo el Govern de Quim Torra ya que, en su opinión, «es una vergüenza para el pueblo catalán», «reprime el independentismo popular» y sus «únicas políticas efectivas han sido la ejecución de desahucios y la represión». También, después de que algunas universidades aceptaran brindar facilidades a los estudiantes movilizados en las protestas.
Precisamente fue el SEPC el que demandó a las autoridades universitarias que se suspendiesen las lecciones hasta que se consigan sus reivindicaciones y pidió que se facilite a los estudiantes «cambiar fechas de exámenes y que no se penalicen las ausencias de los estudiantes de grados de Formación Profesional» que participan en las protestas. La Universidad de Girona y algunas facultades de la de Barcelona ya han accedido a ofrecer métodos alternativos de evaluación a los huelguistas y otras universidades catalanas se lo están pensando.
Pero no son todas las autoridades universitarias las que ceden a las exigencias de los estudiantes independentistas. El pasado 14 de octubre, a la luz de la sentencia del 1-O, la organización de profesores Universitaris per la Convivència censuró la deriva nacionalista de los rectores y criticó un comunicado de la Asociación Catalana de Universidades Públicas lamentando el fallo del Tribunal Supremo. Los profesores han pedido a los rectores «respeto a la libertad ideológica de sus miembros y al Estado de Derecho».
