ERC salva los presupuestos pero obliga a Mas a acudir a la comisión del fraude
Los republicanos habían evitado hasta en cuatro ocasiones que el President diera explicaciones en sede parlamentaria
ERC da una de cal y una de arena a CiU. Si esta mañana los republicanos han sellado un pacto para los presupuestos de 2015 con el partido al frente de la Generalitat, por la tarde han registrado una moción para que el president Artur Mas dé explicaciones en la comisión de investigación del fraude.
El cambio de postura del partido de Oriol Junqueras llega después de meses donde se ha intentado tapar el asunto. Hasta la fecha, ERC había salvado hasta en cuatro ocasiones al líder del Ejecutivo catalán de tener que dar explicaciones en sede parlamentaria. La presente decisión de los republicanos puede estar motivada por las informaciones aparecidas este fin de semana en varios medios de comunicación que apuntan que la trama de las ITV, donde se encuentra imputado Oriol Pujol, contactó con Mas para llevar a cabo sus negocios ilícitos.
Un testigo de primera
La decisión de ERC es determinante. El president deberá acudir a la comisión ya que el resto de partidos, excepto CiU, ya se han mostrado a favor de su comparecencia. Los frentes que se le generan al líder del Ejecutivo catalán son amplios. Desde sus años como consejero en los Gobiernos de Jordi Pujol pasando por su labor al frente de CiU con la eclosión del caso Palau. Sin olvidar la regularización de fondos que su padre tenía en Lichtenstein.
De cara al público, Mas siempre se había mostrado dispuesto a colaborar con la comisión. No obstante, ni CiU ni su principal socio, ERC, habían permitido comparecencia.
Acuerdo presupuestos
Mientras la corrupción divide a ambas partes, la hoja de ruta del independentismo les une. CiU y ERC incluirán un fondo social «extraordinario» de 100 millones de euros para temas como la pobreza energética y los desahucios. De esa cantidad, 10,8 millones serán una aportación extra para impulsar la hacienda propia.
El pacto también incluye acuerdos para seguir con el proceso soberanista como elaborar el plan director de la hacienda catalana, inventariar los bienes públicos catalanes ante una «eventual división de activos y pasivos» con el Estado, crear la seguridad social catalana e impulsar una sindicatura electoral.