El PP se desintegra en su fortín valenciano
Los populares perderían la mitad de los escaños y la mayoría absoluta en la comunidad, según una encuesta de Metroscopia
La llave del Gobierno en la Comunidad Valenciana ha cambiado de bolsillo. La tenía a buen recaudo el Partido Popular, que en 2011 logró, con el dimitido Francisco Camps al frente, una holgada mayoría al obtener 55 de los 99 escaños en juego. De aquella demostración de fuerza, cuando ya los casos de corrupción apretaban, solo quedan cenizas.
Al menos, eso se desprende de la encuesta realizada por Metroscopia para El Pais, que reduce el número de escaños del PP a la mitad. Conseguiría 28 diputados, perdiendo, por tanto, la mayoría absoluta.
Podemos y Ciudadanos lo cambian todo
La relación de fuerzas dejaría la llave del gobierno de la Generalitat en manos de dos nuevas formaciones. Ya saben, Podemos y Ciudadanos. El partido de Albert Rivera lograría 17 escaños, los mismos que la formación de Pablo Iglesias.
El PSOE se quedaría como segunda fuerza por número de votos y alcanzaría los 23 representantes, 10 menos que los que tiene actualmente. Socialistas y populares perderían un total de 37 escaños, a repartir entre las nuevas fuerzas políticas, que se suman a un Compromis al alza (tres escaños más, hasta 9) y a la coalición Acord Ciutadà/IU (5 escaños). A UPyD no se la espera en el arco parlamentario.
Naufragio de Rita Barberá
En el Ayuntamiento de Valencia, la candidatura del PP que encabeza la actual alcaldesa, Rita Barberá, pasaría de 20 a 8 concejales, es decir, perdería la mayoría absoluta que ostenta ahora y que está en 17 ediles, y empataría en actas con Ciudadanos.
Les seguirían València en Comú (plataforma que integra a Podemos) con 6 concejales; el PSOE, con 5 (perdería 3); Compromís con 4 e IU que conseguiría 2 ediles, los mismos que hace cuatro años