El PP resuelve a favor de Vox y Cs el sudoku de la Mesa del Congreso
Casado ofrece a Vox y Ciudadanos los votos suficientes del PP para que tengan representación en la Mesa del Congreso
Mientras el PSOE maniobra para excluir a Vox de la Mesa del Congreso, el PP lanza una oferta de última hora a los de Santiago Abascal. Pablo Casado ha ofrecido a Vox y a Ciudadanos ceder una parte de sus diputados en las votaciones de este martes para que ambas formaciones tengan cada una un puesto en dicho órgano, de tal forma que el bloque de derecha tendrá cuatro de los nueve sillones y los cinco restantes irán a la izquierda.
Por su resultado electoral, a Vox le corresponden dos puestos de la Mesa del Congreso, pero el partido de Pedro Sánchez busca una forma de limitar su presencia allí. Pero la formación de Abascal rechaza la oferta del PP, al entender que Ciudadanos no merece un puesto tras obtener 10 escaños en las elecciones del 10-N, lo que contrasta con sus 52 diputados.
Pero Casado ha insistido en ofrecer sus votos tanto a Vox como a Ciudadanos. A falta de un día para que los 350 diputados electos elijan a los nueve que integrarán el principal órgano de la Cámara Baja, la dirección nacional del PP se ha ratificado en su oferta para intentar que el bloque de la derecha sume cuatro puestos de la Mesa. La decisión queda en manos de Vox, que no está de acuerdo con tener la misma representación que Cs, es decir, un miembro de la Mesa.
El PP se instala en el «no» a Sánchez
Paralelamente, el PSOE pretende reducir la presencia de Vox y para ello se ha reunido con el PNV, ERC y JxCat con el objetivo de que las formaciones nacionalistas apoyen una vicepresidencia y una secretaría socialistas, informa ABC. De esta forma, los de Sánchez votarían a un candidato de Ciudadanos que entraría en detrimento de uno de los puestos que le corresponden a Vox, que también son una vicepresidencia y una secretaría.
Pero, si bien Cs estaría por la labor en caso de un acuerdo con los socialistas, el PP se niega a hacer un cordón sanitario a Vox, a la vez que impulsa la representación de Cs. En los dos escenarios que se abren la formación de Abascal pierde un puesto en la Mesa, con la diferencia de que si rechaza la oferta de Casado es probable que los populares voten solo a sus candidatos, sin apoyar el cordón sanitario pero tampoco sin ayudar a evitarlo.
Votar solo a sus candidatos garantiza al PP dos puestos de la Mesa pero deja en el aire la entrada de Cs. Diciendo «no» al cordón sanitario a Vox, Casado inaugura otra etapa en la oposición. Este lunes, ha trasladado a sus diputados y senadores electos que «España lo que necesita hoy de nosotros es que sigamos en nuestro sitio» y ha pedido a los representantes que se mantengan «firmes» contra el PSOE.
El problema no es el PP, dijo, sino el PSOE, que negocia la soberanía nacional con «defensores del terrorismo», «condenados en firme» y «golpistas silenciados por delitos de sedición». Evidentemente, Casado ha subrayado que no facilitará la investidura de Sánchez, «el peor socialista de los últimos 40 años», al que ha acusado de querer romper el sistema constitucional y querer desaparecer al PP como alternativa.
«Nadie va a cambiar el sistema por las bravas» y nadie les «va a echar», ha advertido. A los suyos ha dicho que el PP debe liderar la oposición para hacer que el PSOE se «retrate». «El PSOE, Podemos y los nacionalistas no están intentando hacer el Gobierno que pueden, sino el régimen que quieren sin espacio para una alternativa», ha añadido.