El Gobierno lleva al TC la propaganda internacional de Torra
El Ejecutivo de Pedro Sánchez recurre ante el Tribunal Constitucional el Plan de Acción Exterior del Govern de Quim Torra
El Gobierno de Pedro Sánchez acusa recibo del desafío del Govern de Quim Torra sobre el Plan de Acción Exterior que la Generalitat aprobó el pasado 25 de junio y sobre el que el Ejecutivo central había enviado un requerimiento en agosto. Tras constatar que el gobierno catalán ha respondido «negativamente» a su petición, la Moncloa llevará el plan de propaganda internacional al Tribunal Constitucional (TC).
La ministra portavoz Isabel Celaá lo ha anunciado este viernes, después del consejo de ministros, y ha explicado que la Generalitat se ha excedido en sus competencias y ha menoscabado las del Estado en el «contexto» de un proceso independentista «que pretende el desprestigio de la imagen internacional de España». Previa consulta al Consejo de Estado, el Gobierno presentará un recurso por conflicto positivo de competencia.
Para el Gobierno el Plan de Acción Exterior plantea «un conflicto de competencias» entre la Generalitat y el Estado, por lo que invoca el artículo 161.2 de la Constitución «para que se produzca la suspensión» del mismo. «Persisten los problemas señalados en dicho requerimiento», ha afirmado Celaá, en alusión a la advertencia lanzada a Torra en agosto de que su gobierno no es competente para aprobar una iniciativa con esos contenidos.
El Plan de Acción Exterior para 2019-2022, según describió el conseller de exteriores, «marca el camino de Cataluña para convertirse en un actor internacional todavía más influyente y de prestigio». El documento se refiere a los consejeros catalanes como «ministros» y a Cataluña como «país reconocido» y se fija objetivos como tener interlocución directa con embajadas y con la UE, atribuciones reservadas a la acción exterior del Gobierno central.
Si el TC dicta la suspensión que exige el Gobierno, la Generalitat no podrá llevar a cabo ninguna iniciativa contenida en el plan. Es decir, el Govern de Torra no podría invocar en ninguna actuación este plan si llega a ser suspendido, pero no tendría que cerrar sus «embajadas» catalanas que, si bien están recogidas en el documento, han sido recurridas en procesos independientes y paralelos, y además algunas preceden al plan.
Borrell va a por las «embajadas» catalanas
Mientras el Gobierno se enfoca en el Plan de Acción Exterior de Torra, Exteriores ataca las «embajadas» catalanas que la Generalitat ha inaugurado y que pretende inaugurar en distintos países. El departamento de Josep Borrell ha recurrido las delegaciones de la Generalitat ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), al calificarlas de estructuras de Estado «al servicio de un proyecto de transición nacional de carácter secesionista».
Las «embajadas» más recientes recurridas por Borrell son las que la Generalitat pretende abrir en Túnez, Argentina y México. Exteriores ha transmitido que son «lesivas» para los intereses del Estado y «van más allá de las competencias que debe tener una delegación», difundiendo una imagen falsa de España «para socavar la simpatía y los apoyos». También está pendiente un recurso para cerrar las delegaciones de Londres, Ginebra y Berlín.
El conseller de Acción Exterior, Alfred Bosch, en un acto de provocación a Borrell, respondió que su consellería «no tocará ni una coma» del Plan de Acción Exterior y anunció el 8 de octubre los nombres de los delegados de las nuevas «embajadas catalanas». «A pesar de la ofensiva judicial con tintes políticos del ministro Borrell seguimos adelante», ha dicho, añadiendo que «la acción exterior de Cataluña es legal, legítima y necesaria».